Que sí, que el café de especialidad está muy bien y todo eso, pero pagar 3 euros de media por un café cada buena mañana y tener que esperar 10 minutos a que te lo traigan mientras llegas tarde al trabajo, la verdad, no tanto. Que un día es un día, todos lo sabemos, pero hay que ser prácticos. Y ahí es, precisamente, donde entra en juego Syra Coffee. F: Cortesía de Syra Coffee

El nuevo Syra Coffee cuenta con 200 metros cuadrados, y aspira a convertirse en mucho más que una cafetería apta para todos los públicos

Hablamos de café de especialidad, sí. Preparado de la mano de las mejores manos expertas, también. Pero sin el dolor de cabeza y el tembleque de cuenta bancaria que tantas veces acompaña a esta experiencia. Hace ya más de tres años os contábamos de la existencia de su primer local, en el transitado barrio de Gràcia. Un establecimiento pequeño, de apenas 20 metros cuadrados, que abría sus puertas en octubre de 2015 con el objetivo de democratizar el buen café en el barrio y en la cosmopolita ciudad de Barcelona. Ahora, Syra Coffee abre nueva cafetería en el barrio más alternativo de la ciudad y llega a Poblenou por la puerta grande. En lo que es, sin duda, una apuesta sin precedentes. 

El nuevo establecimiento es un local de –ojo al dato– 200 metros cuadrados, que aspira a convertirse en mucho más que una cafetería apta para todos los públicos. Concebido en colaboración con Itnig –una constructora de startups fundada en 2011 con base en el mismo barrio– busca llegar a ser una especie de incubadora en Poblenou y estará al 100% operativo en la primera semana de septiembre. La recién estrenada cafetería ha multiplicado por diez el tamaño de su primer enclave en Gràcia, y el espacio también cuenta con una zona polivalente para la realización de eventos y salas de reuniones que podrán alquilarse a partir del mismo mes.

Aunque el concepto siempre se ha basado en el take away, la ingente cantidad de espacio que ofrece este nuevo local te invita a sentarte y a degustar tu café sin ningún tipo de prisa. Eso sí, este hecho implica que todas las bebidas se sirven en recipientes de plástico y de papel recubierto de plástico; así que si como a nosotros te preocupa el medio ambiente, tráete tu keep cup personal desde casa –o adquierela de bambú y personalizada en el mismo establecimiento– y voilà, problema solucionado. ¿Un plus? Si te haces con su Bamboo To Go Cup, la primera bebida que consumas en ella corre de su cuenta, y el resto de veces que la uses te aplicarán un descuento especial. 

Mi recomendación: empieza con un Flat White, que te prepararán a la perfección y constituye un coffee fix ideal para todos aquellos que somos adictos (y a mucha honra, oye) al café. Sigue luego con tu pasta o porción de bizcocho favorita, y deja que te recomiende su pain au chocolat, uno de los mejores que he probado en Barcelona. Y no nos olvidemos de sus galletas de Nutella caseras recién horneadas, que harán que se te caiga la baba solo con mirarlas, ni de sus vegan granola cookies…

Yassir Raïs, un arquitecto amante del café de especialidad, es la mente creativa que encabeza el proyecto. Como también ha hecho mucho diseño gráfico –desde los visuales al merchandising, pasando por la conceptualización y el packaging, se encarga él–, decidió elaborar paralelamente un fanzine bimensual (que ahora pasará a ser trimestral) autoeditado y auto imprimido, como espacio para mostrar el trabajo de artistas locales que frecuentan Syra Coffee desde sus inicios. Además, éste sirve como plataforma comunicativa para descubrir la historia detrás de sus nuevos cafés de temporada y sus agricultores; un valor añadido que sin lugar a dudas posiciona a Syra como algo que va mucho más allá de una simple cafetería de moda. 

Su eslogan, simple pero efectivo, reza en la puerta de cada una de sus cafeterías: “Good coffee here”. Desde aquí lo secundamos

Y hay más: aunque al principio trabajaran con tostadores locales, hace año y medio decidieron dar el salto y empezar a tostar su propio café. Lo hacían a las afueras de Barcelona, hasta que hace unos cinco meses dieron con un local vecino a su primera cafetería en Gràcia y hace tan solo mes y medio decidieron abrir su propio Shop+Roastery a apenas un minuto de ésta: un espacio de casi 250 metros cuadrados que actúa como tostador, sala de formación y de stock, oficina y tienda; con una gran variedad de accesorios que giran entorno al café, revistas especializadas y un largo etcétera. Su eslogan, simple pero efectivo, reza en la puerta de cada una de sus cafeterías: “Good coffee here”. Desde aquí lo secundamos y corroboramos que sí, aquí hay buen café, pero sin ninguna pretensión y siempre servido con una sonrisa.