Gustaf Westman lleva años demostrando que el diseño también puede ser juguetón, táctil y sin restricciones. Entre curvas, lacas brillantes y volúmenes con vibras cartoon, el creador sueco ha construido un imaginario que rompe con la rigidez nórdica y abraza una estética pop que ya es reconocible a kilómetros. Sus mesas curvy, sus espejos inflables y sus sillas de bordes redondeados forman parte de un universo donde lo doméstico se vuelve divertido.


El hype del momento: una estantería que es un puzzle gigante
Su última obsesión —y la nuestra— es la Puzzle Shelf, una estantería modular en forma de piezas de rompecabezas gigantes. Con ese acabado glossy casi comestible que caracteriza al diseñador, la pieza puede organizarse, reordenarse o apilarse como si estuvieras montando un juego de construcción a escala humana. Cada módulo encaja literalmente con el siguiente, creando un sistema de almacenaje que es a la vez escultura, juguete y mueble funcional. Desde que la presentó, el proyecto se ha disparado en redes: lo repostean interioristas, fans de la estética dopamine decor y creadores de contenido que la quieren en todos los colores (a cada cual más vibrante).


El toque Apple
El fenómeno escaló definitivamente cuando Apple la incorporó en una de sus campañas recientes, coronándola como objeto de deseo global. La estantería aparece como pieza clave en un entorno tecnológico limpio, casi futurista, y aun así mantiene ese guiño naïf, esa sensación de “esto podría estar en mi salón si fuese un poco más valiente”. El contraste funcionó: la Puzzle Shelf se viralizó en cuestión de horas y se convirtió en uno de los muebles más buscados del mes.
Hoy, la estantería-puzzle está disponible en formato made-to-order, lo que refuerza su aura de pieza de colección. No es un mueble para pasar desapercibido; es un statement estético, la prueba de que el diseño no está reñido con la extravagancia y la diversión. Con la Puzzle Shelf, Gustaf Westman confirma una idea que recorre su trabajo: los interiores necesitan más identidad y menos solemnidad.