La calle Enric Granados alberga pequeños grandes tesoros a mansalva. Eso lo sabemos todos. Una de estas perlas es el Filete Ruso, una extensión de La Burg del que habréis escuchado hablar en más de una ocasión.

Buen producto, limpio y justo. O, lo que es lo mismo, slow food. Y también km 0, que podría definirse como productos estacionales, de proximidad y ecológicos. Esta es la filosofía principal de El Filete Ruso, cuya intención es rendir homenaje a la hamburguesa gourmet.

Siguiendo con este objetivo de respetar escrupulosamente la calidad de las materias primas, este restaurante prepara cada temporada unos platos de estación que acompañan la extensa variedad de sabrosas burgers de la carta. Pues bien, ahora, en pleno invierno, El Filete Ruso ofrece un menú bastante imperdible.

Se trata de una potente hamburguesa de jabalí con huevo frito, queso de pastor, acompañada de compota de manzana y chips de alcachofa. Y no viene sola, no. Junto a ella, una novedosa hamburguesa especial de carne de entrecot de ternera eco con huevo poché, trompetas de la muerte y sal de hierbas mallorquinas.  

Entre otros platos Km 0  de invierno, el menú presenta también una sopa de cebolla eco y una ensalada de calçots, bonito de proximidad, coca de espelta,  Kamut y escarola. Si ya habéis empezado a salivar, no tardéis demasiado en acudir al número 95 de Enric Granados. Worth it!