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Ariana Díaz Celma

El Harry’s hace ya tiempo que pasó a mejor vida pero, por suerte para los fans de la coctelería pro, el Solange ha ocupado el espacio, que ahora corre a cargo de los hermanos Pernía. La coctelería clásica se mezcla con algunas recetas de autor en un espacio con carta, lo cual no deja de ser algo curioso, puesto que no todos los locales de estas características la tienen. Las múltiples referencias se aposentan en las estanterías situadas detrás de la barra para mostrar el surtido alcohólico -y premium- de la casa a modo de decoración.

El Solange es el nuevo templo de la coctelería para los fans de las mejores combinaciones premium

Entre sus cócteles más personales encontramos el The Ocean Club, a base de Gin Oxley, zumo de pomelo, miel de flor de manzanilla y cardamomo verde, clara de huevo y reducción de naranja sanguina; un sanguinario Rosa Klebb, con vodka Belvedere, zumo de tomate tamarillo y frambuesa, zumo de limón Meyer tostado y ‘napalm’ casero; o el Stardust, una bebida elegante e impecable, que encuentra su inspiración en cómo Ian Fleming se iluminó con Hoagy Carmichael para crear un mito, hecho a base de Maker’s Mark macerado con arándanos azules, zumo de lima, pimento dram, sirope de arce, clara de huevo y granadina. No obstante, si ninguna de las sugerencias de la carta te convence, siempre puedes pedir a los cocktail makers del lugar que te preparen algo a tu antojo.

El selecto ambiente de la coctelería se lo debemos a Carlos Martínez, gracias a sus espejos, detalles en latón, la siempre elegante madera, el mármol y una iluminación íntima y agradable. El conjunto es perfecto para tomar una buena bebida cómodo y en un ambiente único.

 

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