‘Conversación Polifónica sobre el Diseño y Otras Cosas. Retrato Imperfecto de Curro Claret’ (Gustavo Gili) es probablemente el libro que mejor define al diseñador más irreverente, pero también al más cabal que ha parido la disciplina en los últimos años. Porque Curro Claret vive empeñado en demostrar que el diseño puede tener también un fin de carácter social y que puede existir más allá de un negocio para la industria. Entrevistamos a este outsider del diseño, aunque más vinculado que nadie al mismo, en la presentación del libro, que tuvo lugar en el Dos Billares de Casa Camper.

«El diseño debe encontrar otros mecanismos para sobrevivir fuera de ámbitos puramente mercantiles»

Dicen que perteneces a esa clase de diseñadores que habría que inventar si no existiera. ¿A qué crees que es debido?

Quien quiera que haya dicho esto es alguien cercano. Por un lado, está claro que el diseño está muy mediatizado por el mercado y las ventas. Por el otro, existen una serie de espacios y colectivos que no pueden acceder al mismo, y que no atienden a dicho mercado, pero donde también debería existir el diseño. Y el gobierno no tiene ni puede estar pendiente de financiar todo el diseño que hay a nuestro alrededor fuera de ese ámbito del mercado. Yo creo que el diseño tiene que intentar llegar a todas partes, independientemente de la realidad comercial.

¿Cómo definirías el peso del carácter social del diseño de tus objetos?

El tema social es algo que surge por una sensibilidad a colectivos que quedan al margen y va ligado al hecho de una preocupación de cómo el diseño puede llegar a lugares donde normalmente no está presente. Me preocupa buscar otras maneras de llegar a estos sitios. El diseño debe encontrar otros mecanismos para sobrevivir fuera de ámbitos puramente mercantiles.

¿Cuáles son bajo tu punto de vista?

Es algo que a mí también me gustaría saber, me mueven otras formas de retorno. Por ejemplo, empecé a trabajar con la Fundació Arrels, un espacio en el que algunos proyectos tienen retorno económico y otros no, sustentada por gente sin hogar que quiere buscar su propia autonomía. Así es como empecé a trabajar con Camper y diseñar algunas de sus tiendas, por ejemplo. Nos vinieron a buscar porque les gustaba el trabajo que hacíamos en la Fundació y me pareció bien por la grandísima oportunidad que implicaba en muchos aspectos.

¿Qué diferencia hay entre arte y diseño?

Es complicado decirlo con exactitud. Son términos que tienen muchas lecturas. Imagino que el diseño tiene una función más concreta y el arte más libertad en su proceso. El diseño tiene unos intereses concretos de venta, por ejemplo. No obstante, en la práctica, no creo que deba ser así. En el norte de Europa, por ejemplo, el concepto de diseñador-artista es más habitual que aquí. Estamos ante una cuestión filosófica-semántica que cuesta sintetizar en pocas palabras.

«A veces el diseño tiene una seducción falsa que no va más allá y esto debe cambiar»

¿Cómo tiene que ser una marca para que Curro Claret decida que vale la pena trabajar para ella?

Una marca debe tener ganas de atreverse y tiene que ser sensible con las circunstancias. Si lo ligamos a un proyecto concreto, la firma tiene que querer cuestionar alguna cosa. Y no es que solo quiera trabajar con gente con riesgo de exclusión social, aunque sí me parece muy interesante. Es más el tema de que a veces el diseño tiene una seducción falsa que no va más allá. Pero cuando una empresa se pregunta el papel de estas cosas todo es distinto.

Revistas como AD te han otorgado el galardón de ‘Mejor Diseñador del Año’ el pasado 2015. ¿Ser outsider se lleva?

Estamos ante un profesión a la que se le exige que se reinvente constantemente y que se cuestiona la esencia de sí misma. Yo creo que no hay un único camino, sino muchas realidades distintas. El premio es un reconocimiento a la reflexión de que el diseño debería estar presente en muchos sitios en los que ahora no lo está.

¿Cómo afecta el DIY y la importancia de dar una segunda vida a los objetos sobre tu trabajo?

Una parte de mi trabajo sí tiene que ver con el ‘hazlo tu mismo’ y la segunda vida de los objetos, pero no todo. Vivimos en una sociedad de exceso, de usar y tirar, y esto es algo que se ve mucho en el diseño. Siento una gran insatisfacción en el hecho de hacer cosas que duren poco y que se conviertan en basura. Creo que es importante tomar conciencia de lo que se tira y reciclar no es la solución del exceso, o como mínimo no la única. La durabilidad de los objetos y otros factores podrían ser una posible solución. No puede ser que cada día cada uno de nosotros tire un kilo de basura doméstica.

«Vivimos en una sociedad de exceso, de usar y tirar, y esto es algo que se ve mucho en el diseño»

¿Cuáles son tus diseñadores favoritos? ¿A quién admira un personaje como Curro Claret?

Enzo Mari, Tibor Kalman, Martí Guixé o Miguel Adrover, por citar algunos.

Para ti qué es más importante: ¿funcionalidad o estética?

Las dos cosas son importantes, el diseño es función y forma. Es una combinación en la que es complicado determinar qué papel tiene cada una. La función es importante, pero también puede conseguir que te hagas preguntas sobre algo en particular. Por otro lado, la estética sucia y vasta puede tener un discurso y mucho sentido en ciertos momentos.

Según tu punto de vista, ¿qué necesita el diseño para ser considerado diseño?

Más allá del testimonio que pueda aportar, es importante preguntarse el papel de dicho diseño en la sociedad. No es sólo un instrumento en el mercado, sino que también debe tener un papel en la vida y te ayuda a preguntarte cosas sobre lo que te rodea.

Tus hotspots favoritos son…

Cuando tenía en taller en la Fábrica Lehman, siempre íbamos a una bodega que estaba a una calle, un bar de toda la vida, una especie en peligro de extinción. Ya no hay lugares normales.

Prohibirías…

En materia de diseño, cualquier cosa que implique a gente padeciendo tras un objeto. Aunque si esto se hiciera realidad, deberíamos prohibir la mayoría de teléfonos móviles.

Nunca pensabas que terminarías…

Estando tan cerca del mundo del lujo. A menudo puede tener un papel privilegiado para hablar de ciertas cosas, pero en la práctica es difícil que ayude a que se haga nada.

No puedes parar de escuchar en modo repat…

El Niño de Elche.

Para ti ser Good2b es…

Estar con ‘el enemigo’. Aunque puede ser peligroso a veces, es necesario para poder combatirlo.

Photos © Cecilia Díaz Betz