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Ariana Díaz Celma

Mezclar música latina y electrónica a estas alturas de la película no es descubrir América. Eso ya lo sabemos. Lo que sí cuesta un poco más es que suene original y eso es lo que precisamente han conseguido Dengue Dengue Dengue. Este trío de Lima (Peru) lo ha conseguido gracias a su disco La Alianza Profana, una explosión de dub, cumbia y techno que se entrelaza con psicodelia setentera. Hablamos con Felipe, Rafael y Nadia coincidiendo con su visita al Sónar, al escenario de la Red Bull Music Academy para ser exactos, el viernes 13 a las 18:30 horas. Y se quitaron las máscaras, sí.

Pregunta obvia para empezar: ¿de dónde sale vuestro nombre?

Felipe: En Lima, cuando no quieres ir de fiesta pero de repente viene un amigo a casa, te anima a salir y te empiezan a entrar ganas, se dice que te entra el dengue.

Nadia: Además, los tres vivimos juntos y el salón de nuestra casa lo preside un disco de Enrique Lynch que se llama Dengue, Dengue, Dengue. Las letras aparecen bien grandes en la portada.

Dengue Dengue Dengue es un fenómeno relativamente nuevo a este lado del Atlántico, ¿cómo nació el proyecto?

Rafa: Hace ocho años que Felipe y yo trabajamos en distintos proyectos. Hace ya un tiempo fuimos de vacaciones a Argentina y vimos a gente que hacía música de baile con ritmos tropicales. Al volver decidimos que eso era lo que nosotros queríamos hacer. Encontramos la casa donde estamos viviendo ahora, nos mudamos y aquí seguimos.

¿Cómo os repartís el trabajo?

N: La propuesta de Dengue pretende abarcar el mayor número de sentidos posible. A mí me toca la parte visual. En la puesta en escena hay mucho flúor como en un viaje chamánico, por eso metemos las máscaras, porque dan color inmediato. No queremos tener el típico show de dj, sino algo más sensorial.

F: Queremos que la carencia de la música te lleve a un estado de trance único. Rafa y yo somos los encargados de trabajar los temas, aunque él hace más el lado relacionado con lo que sería la banda y yo me encargo de temas más de estudio. Después en el escenario se mezcla con el lado visual de Nadia.

R: Cuando estamos en directo Felipe y yo cambiamos los papeles cada dos temas, así que vamos al 50%.

«Queremos que la carencia de la música te lleve a un estado de trance único»

¿Por qué las máscaras?

R: Antes teníamos otro proyecto y era una buena forma de diferenciarlo. Además, nos sirve para mostrar el lado lúdico de nuestra nueva música. Son un elemento que ayuda a representar las fiestas patronales, aunque a nuestro modo.

Durante años se huyó del folclore porque se consideraba pasado de moda, pero ahora muchas bandas como vosotros lo recuperan. ¿A qué se debe?

F: Lo primero que escuché basado en el folclore pero reinventado fue Sr. Coconut. Después vino todo el movimiento que creó el sello argentino ZZK Records, y que promovía este tipo de música como carne de discoteca y no como show. Ahora se baila en los clubs, esa es la diferencia.

R: En Estados Unidos tienen el hip hop que viene del funk y el R&B. Aquí, durante muchos años intentamos copiarles sin mucho éxito. Ahora por fin estamos rescatando nuestras propias influencias con muy buenos resultados. Es lo que nos diferencia del resto y hay que explotarlo.

N: Por fin estamos recuperando nuestra identidad musical.

Se trata de música inspirada en el folclore sudaméricano pero estáis girando por todo el mundo. De hecho, al cabo de un tiempo de sacar vuestro primer disco, La Alianza Profana, un sello alemán se interesó por sacarlo en Europa. ¿Se entiende mejor vuestra música en algún país o zona contretos o creéis que es universal?

F: En cada país hay una escena pequeña que lo entiende, así que nos sentimos arropados vayamos donde vayamos.

N: En latinoamércica nacimos con el chip cumbiero y es muy fácil que te entiendan. Lo bueno es que Europa es mucho más cosmopolita y la gente aquí está más acostumbrada distintas cosas. De hecho, si de repente metemos ritmos hindús, lo entienden antes los europeos que los limeños.

Decidnos bandas de referencia tradicionales limeñas.

F: Debemos decir que hacemos fiestas que se llaman Toma con música tropical y electrónica. En los últimos meses hemos incluido conciertos de bandas míticas que nos gustan. Podemos mencionar dos a las que admiramos especialmente, Los Mirlos y Los Wemblers, que siguen con la alineación original. El público joven lo entiende y le gusta la fusión entre estos conciertos y la electrónica que pinchamos después.

¿En qué andáis ahora?

F: Estamos preparando el segundo álbum, que saldrá a finales de año. En él estamos explorando la música afroperuana.

Vuestro hotspot favorito es…

F: Barraca, un barrio donde sucede todo lo que nos gusta. Hay muchas coproductoras independientes haciendo fiestas que valen mucho la pena.

No podéis parar de escuchar en modo repeat…

A Marco Passarani, la mitad de Tiger&Woods, que estuvo ayer pinchando en la barbacoa de la Red Bull Music Academy junto con Tessela. También nos encanta un Dj de Lima que se llama Sietecatorce.

Prohibiríais…

N: La televisión basura.

Nunca pensabais que terminaríais…

F: Quitándome el polo en un escenario delante de la gente.

R: Yo bailando sin parar en un escenario y también delante de mucha gente.

Para vosotros good2b es…

Seguir dengueando.

* Fotos: Cecilia Díaz Betz