Desoriente, el vegano que ha seducido a los más carnívoros
El 80% de humedad que tenemos estos días en Barcelona nos ha dejado el estómago cerrado, muchxs venimos de presentar el trimestral y estamos deprimidísimxs, hay tantos eventos en la Ciudad Condal que sufrimos un fomo continuo… Pero, en medio de este bullicio, existe un oasis verde que nos hace poner el contador a cero. Un lugar en el que te vas a querer perder a pesar de estar lleno de señalizaciones. Una selva que se convierte en un refugio para los sushi lovers, los veganos inconformistas e incluso los carnívoros más acérrimos. Es Desoriente, ese restaurante vegano asiático que te mira con ojitos tiernos cada vez que pasas por la calle Ramón Turró en Poblenou. F: Cortesía de Desoriente.
Desoriente deja K.O. a todos aquellos que creen que la cocina vegana es aburrida y sosa convirtiéndose en su nuevo favorito
Imagínatelo. Cae la noche, el calor cesa, ¿es eso un poco de brisa marina? Bajas por la encantadora Rambla de Poblenou y en algún punto giras a la izquierda, hipnotizado por unas luces que te trasladan a una ciudad asiática vestida de edificios altísimos, casi distópica. Es el neón, señal de que Desoriente te ha llamado y tú has acudido a su llamada. En este restaurante todo es casero, el pan bao, el foie gras vegetal y hasta la kombucha, que resulta refrescantemente deliciosa con el punto de acidez perfecto. Juega a dos bandas ofreciendo una cocina que a veces es de base asiática vegana, otras vegana con influencias asiáticas e incluso llega a tener ese gamberrismo de los dive bars americanos.
Su lema ya grita toda una declaración de intenciones: “Desoriente es un restaurante donde el Taj Mahal, el Monte Fuji, las playas de Tailandia, Angkor (Camboya), La Costa Brava, Halong Bay (Vietnam), Tokio y el Poblenou se encuentran por los sabores”, y es que los creadores de este concepto tan singular son símbolo de esa mezcla de gastronomías. Cliff Ubaldo, nacido en Filipinas, y Maurizio Gorga, italiano, representan la fusión de sabores que se convierte en la clave del éxito de Desoriente.
El restaurante representa a la perfección el espíritu de Poblenou, un barrio lleno de expats que desayunan shakshuka, comen cachapas con queso y cenan escudella i carn d’olla
Son muchos los platos y platillos que despertarán ese sabor umami que va a hacer que tu boca se convierta en una mismísima rave, pero lo que a nosotrxs nos pasó con las wasabi croquettes fue amor a primer bocado. ¿Puede que fuese el efecto del primer muerdo de la carta? Puede. Porque también se nos revolucionó el paladar con su Rock & Roll uramaki, su Tikka Masala Roll y, como no, el líder de masas Sweet & Spicy Roll. El caviar de tapioca, el panko tostado, la “carne” Moving Mountain sazonada o la crema de anacardos con mostaza son solo algunos de los detalles que hacen del sushi de Desoriente una experiencia en sí misma que, como bien nos aconsejaron, no necesita salsa de soja. ¿Cómo mejorar algo que ya cuenta con el 100% de deliciosidad?
Más. Al archiconocido bikini japonés katsu sando le dan una vuelta de tuerca a base de aguacate y jackfruit marinado en salsa “secreta”, las korean bravas son una verdadera colisión de titanes -el kimchi y el alioli-, el pad sa thai proporciona esa cremosidad que tanto nos gusta del icónico plato coreano y la coronan con una brocheta de tempura de tofu que, por sencilla que parezca, es un emblema de lo que significa la fórmula de Desoriente: la cocina vegana -por fin- está verdaderamente trabajada. A todo esto, sería un pecado salir del restaurante sin probar uno de sus cócteles de autor que tan bien resumen la esencia del restaurante: el Tamarindo mojito, el Kiwi & mandarin Daiquiri, la Passion fruit Margarita, el Spiced up espresso Martini, la Michelada went to Korea, el Aperol Spritz went to Asia y el Sake vermut.
Okay. Llegados a este punto, te preguntarán por el postre, y seguro que te hablarán de su famosa tableta de Snickers casera (¡y vegana!). No lo dicen por decir, hay quien va al restaurante solo a por este delicioso postre que reinventa la muy querida chocolatina a golpe de turrón, caramelo y cacahuetes salados. Es el punto y final perfecto, justo lo que necesitas antes de volver a la realidad y orientarte de nuevo.
En este espacio que consigue rendir culto al exceso y, a la vez, proporcionar esa paz que dan las líneas simples de la arquitectura japonesa, te encontrarás a ti mismx disfrutando de sabores que nunca habías imaginado mezclar.
Detalles
- Dirección: C/ de Ramon Turró, 209, 08005 Barcelona
- Ambiente: Desenfadado y con mucho rollo
- Horario: D-J de 13:00h a 00:00h. V-S de 13:00h a 01:00h
- Teléfono: 934069940
- Tipo: Restaurante
- Web: https://www.desoriente.com/es