Esta mañana nos hemos despertado con la triste noticia de que Keith Hufnagel, skater y fundador de la legendaria marca HUF, ha fallecido a los 46 años. HUF Worldwide lo ha comunicado a través del Instagram de la marca con un texto que recuerda la figura de un personaje clave en el mundo del streetwear que revolucionó la forma en la que vestimos hoy en día. F: Keith Hufnagel a través del objetivo de Ryan Allan para la revista ‘Monster Children’. © Ryan Allan

Muere Keith Hufnagel, una de las figuras más importantes del mundo del skateboarding, tras combatir contra un cáncer cerebral durante los últimos dos años y medio

El comunicado de HUF nos descubre que Keith estuvo luchando contra el cáncer cerebral durante los últimos dos años y medio. Lo combatió durante mucho más tiempo de lo que le marcaron los doctores en su diagnóstico, pero desgraciadamente acabó sucumbiendo a la enfermedad. El comunicado celebra su legado diciendo que Hufnagel era el corazón y el alma de la marca, y remarca la inspiración que supuso para toda la gente de su alrededor como alguien que hizo las cosas a su manera y triunfó merecidamente.

Hufnagel nació en Nueva York en 1974, y desde bien joven se hizo un nombre en el mundo del skateboard de la ciudad norteamericana. A comienzos de los 90 fue un personaje pivotal en la cultura neoyorquina del skate, mucho más refinada que la californiana. Era el representante ideal del estilo, y en 1992 se mudó a San Francisco y allí se convirtió en icono urbano. Fundó HUF Worldwide en 2002 y abrió su primera tienda en San Francisco, lugar que rápidamente se convirtió en un punto de culto por sus lanzamientos exclusivos de zapatillas, siendo los más memorables los de la línea Nike SB.

Hoy en día su legado no solo se extiende a tiendas repartidas por todo el mundo, también a una revolución en el mundo del skate, tanto como parte activa y practicante del deporte como diseñador y trabajador en otros de sus ámbitos. Un día negro para el skate, que mantendrá para siempre en su recuerdo una de las figuras clave de su universo. Descansa en paz, Keith Hufnagel.