Nunca el concepto de sandwich gourmet tuvo tanto sentido como ahora. Entrepanes Díaz ensalza uno de los clásicos más básicos de la historia de la gastronomía universal: el emparedado. Dos trozos de pan con un pedazo de comida entremedio con el que presionar ambas rebanadas. La ecuación es fácil, que el resultado sea exquisito, no tanto. Para ello, Kim Díaz, propietario del vecinísimo Bar Mut, que cuenta con el Mutis en su piso superior, ha abierto un bar de esos que parece de toda la vida. Y no sólo por el hecho de que la barra sea la protagonista del espacio junto a los taburetes, como manda la tradición, sino también porque ningún camarero tiene menos de 50 años. En Entrepanes Díaz quieren que el servicio sea entrañable, algo que a menudo echamos en falta en la mayoría de los locales de la ciudad.

Entrepanes Díaz ensalza uno de los clásicos más básicos de la historia de la gastronomía universal: el emparedado

Pasemos ahora a la carta. Los favoritos, como se puede intuir por el nombre del lugar, son los bocadillos, que pueden etiquetarse como sandwiches de autor. La ecuación es sencilla: buen pan -lo compran a diario en el Forn de Sant Josep, un horno que lleva abierto en el Eixample desde 1912-, materia prima de primera y combinaciones ingeniosas, que nunca quieren pasarse de originales. Entre los favoritos encontramos el de calamares, servido con mayonesa en su propia tinta, un bocado tan sabroso como infalible. Rozando la perfección absoluta está también el bocata de tortilla, individual y que dibuja una perfecta circunferencia, como si de un ovni se tratara, que se rompe al hincarle el diente y hace explotar la cremosidad de los huevos algo crudos. Tal y como debería gustarnos a todos. El Antxón -un sandwich que rinde tributo a Antxón Gómez, director de arte de Almodóvar- está hecho de crujiente de patata, huevo cocinado a baja temperatura y chistorra, un guilty pleasure muy a la altura del lugar. El emparedado de costilla de cerdo confitada o el de cochinita pibil son otros hits de una carta que pide ser probada de pe a pa. Lo mejor de todo es que los ‘entrepanes’ en cuestión son medianos, así que puedes probar varios si vas con un acompañante.

La carta de Entrepanes Díaz la completan una selección de tapas que contempla desde las típicas bravas a una ortiguillas, pasando por zamburiñas u otros clásicos de primera. Todo a partir de 15/25 euros, dependiendo del hambre y la sed que tenga el comensal.

*Gracias por las fotos a La Vanguardia.