El CCCB abre sus puertas a las nuevas experiencias expositivas. Y lo hace con la exposición Björk Digital, un viaje de 90 minutos por el universo de la realidad virtual. A través de los trabajos audiovisuales de la artista en colaboración con algunos de los mejores programadores y artistas visuales del mundo, vivirás una experiencia multisensorial e inmersiva. La muestra llega a Barcelona después de haber pasado por ciudades como Tokio, Sídney, Reikiavik o Londres.

La muestra empieza con Black Lake, el videoclip creado especialmente por Andrew Thomas Huang para el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA)

La exposición gira en torno al último trabajo de la artista, Vulnicura. Un proyecto muy personal donde nos muestra  su yo más oscuro y dolorido tras su separación del artista Matthew Barney. «Vulnicura es el primero de mis álbumes en el que las canciones insisten en cierto orden cronológico, una vez escritas se hizo patente que, sin querer, me había adentrado en la narración de una tragedia griega», escribe la artista en el texto de bienvenida a la exposición.

La muestra Björk Digital empieza con Black Lake, el videoclip creado especialmente por Andrew Thomas Huang para el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA). Rodado en una zona montañosa de Islandia, se ha construido mediante dos pantallas panorámicas y un sistema de sonido diseñado a medida. En ese espacio, el espectador vivirá una experiencia totalmente envolvente. Del mismo modo, ambos artistas nos presentan  Stonemilker VR, donde vivirás una experiencia a 360º en un paraje recóndito de Islandia.

Pero esto no es más que el principio. Junto a Jesse Kanda, Björk presenta otro maravilloso video de realidad virtual: Mouthmantra VR. El videoclip se rodó justo después de la operación de cuerdas vocales de la artista, y nos transporta al interior de su boca donde nos movemos entre su lengua y sus dientes.

Con la intención de ser un instrumento de aprendizaje en las escuelas, la aplicación juega con la música, la naturaleza y la tecnología

Mención especial también para el apartado más digital con NotGet VR, dirigida por Warren Du Preez y Nick Thornton Jones. Björk aparece transformada digitalmente en polilla gigante gracias a la impresionante máscara diseñada por el artista James Merry. Y Quicksand VR, realizado por Neri Oxman, que captura el directo de Björk en Miraikan (Tokio) en realidad aumentada y con una máscara de impresión digital hecha a medida para ella. Y por último, la exposición cuenta con un apartado donde se puede interactuar con la aplicación Biophilia. Con la intención de ser un instrumento de aprendizaje en las escuelas, la aplicación juega con la música, la naturaleza y la tecnología.

Björk Digital es en sí, un recorrido por la carrera profesional de la artista. 24 años de música y tecnología que la han convertido en pionera de la utilización de realidad virtual para los videoclips. Todo un estilo que, junto a su voz auténtica, ha cautivado a millones de personas. Las entradas deben comprarse de forma anticipada reservando fecha y hora concretas. Hay sesiones cada 20 minutos y cada una puede abarcar un máximo de 25 personas. Entra aquí y ¡no te quedes sin!