La Imperfecta Belleza lo ha vuelto a hacer, después de su primera edición en Sauvage Estudio Floral, vuelve con un segundo encuentro en Espacio 88 y una nueva temática: la piel es el narrador de la historia.

La Imperfecta Belleza es una iniciativa de Elsa Yranzo, diseñadora gastronómica, y Marina Senabre, arquitecta y diseñadora gráfica que además se enriquece con la colaboración de personas que comparten puntos de vista y sensibilidades comunes. Nació con un objetivo claro y marcado: hacer visible el despilfarro alimentario debido a los criterios estéticos. Y partiendo de ahí, generar un debate para replantearnos nuestros hábitos de consumo y también sobre los cánones de belleza. Para ello organizan coloquios, exposiciones, publicaciones y cenas con productos recuperados e imperfectos.

La Belleza Imperfecta, reivindica lo bello que fue etiquetado de feo por no ser convencional

Después de su punto de partida, el 9 de junio del pasado año, retoman un nuevo acto en el que la protagonista es la piel. Una reflexión sobre la belleza convencional imperante en la sociedad, protagonista  en la publicidad, el cine y en nuestro día a día. La piel es el órgano que nos protege, la barrera que nuestro cuerpo ofrece al exterior, pero es también el espejo que refleja cómo se encuentra nuestro interior. La Belleza Imperfecta, reivindica lo bello que fue etiquetado de feo por no ser convencional, y que cada supuesta imperfección es una característica que nos hace únicos y, por tanto, hay belleza en ella.

En la exposición, los participantes interactuarán, tocarán e incluso degustarán las piezas que muestran la imperfección de las verduras a través de un itinerario de fotografías, proyecciones e instalaciones entrelazadas con propuestas gastronómicas realizadas con los productos imperfectos de la mano del chef.

Además los asistentes se llevarán a casa una publicación en la que se verá reflejada toda la temática de la exposición.

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