La Casa Encendida acoge Lua Cão, un recorrido de ilusiones ópticas, percepciones acústicas y elementos fantasmagóricos de la mano de Alexandre Estrela y el dúo artístico João Maria Gusmão y Pedro Paiva.

El proyecto, que reúne 21 películas de 16mm y vídeos, empezó hace 15 años cuando Natxo Checa, comisario de la exposición, propuso a los artistas portugueses hacer viajes artísticos por el mundo. El Desierto de Atacama, las Siete Ciudades en las Azores, Timor y el Monte Perdido han sido algunas de las lejanas destinaciones donde pudieron contemplar momias, exhumaciones, rituales funerarios y de trance.

La Casa Encendida ©

Jugando con las luces, las exposiciones y el movimiento, han recreado una experiencia inmersiva para el espectador, una performance cinematográfica que desafía la perspectiva habitual y la mecánica de la visión. Lunas, globos oculares, túneles y ilusiones atmosféricas son algunos de los elementos protagonistas, reunidos bajo “Lua Cão”. El nombre de la exposición hace referencia, precisamente, a un fenómeno óptico y atmosférico por el que aparecen reflejos lunares iridiscentes alrededor de la luna.

 
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Este trabajo colaborativo, que se constituye a modo de diálogo entre dos tecnologías y dos mundos artísticos, se podrá ver en La Casa Encendida hasta el 5 de enero de 2019.