Semanas antes de que empezara la pandemia, el W Barcelona abría su restaurante Fire, un espacio que, a pesar de haber nacido en tiempos inciertos, ha conseguido asentarse como una buena opción para aquellos que aman las brasas. El fuego se presenta aquí como elemento cohesionador de una carta que viste las faldas de uno de los hoteles que marcan el skyline de la ciudad. F: Cortesía de W Barcelona

En Fire el fuego se presenta como elemento cohesionador de una carta que viste las faldas del W Barcelona

Sus platos, a pesar de llevar la marca de la brasa, cuentan con un atrevido contraste de sabores, técnicas y productos ecológicos; pensados como perfecto crossover con una carta de cócteles vibrante y colorida. Los pescados y las carnes se entremezclan con verduras que elevan su sabor gracias al fuego. El resultado es una brasería en un entorno agradable pero siempre high end, que nos recuerda siempre que estamos en uno de los espacios más exclusivos de la ciudad.

La chef Carlotta Delicato es la encargada, desde su apertura en 2020, de servir platos que se facturan en una cocina abierta situada en una isla central que funciona a modo de parrilla. Entre ellos, podemos encontrar platos ya clásicos como el Tomahawk –un rib-eye con hueso largo– o la coliflor horneada sellada al vacío y fermentada durante tres días, presentada sobre crumble con toques de miel y mostaza. Otros platos que han conseguido ganarse el paladar de sus clientes son su bogavante a la brasa, salsa de erizo y melón cantaloupe; o el centollo relleno estilo Fire.

Este verano, además, Fire ha puesto en marcha una iniciativa que ha conseguido el sold out de mesas edición tras edición. The Bonfire, un evento que se lleva a cabo dos jueves al mes, traslada su característica cocina de brasa a la terraza WET DECK del hotel. Reconocidas chefs catalanas como Laura Veraguas o Iolanda Bustros han sido las encargadas de prender el fuego durante este verano, que no solo se puede saborear en los platos sino también en el espectáculo que tiene lugar a medida que transcurre la cena. Septiembre cuenta con las últimas fechas –el 2 y el 16 de septiembre– con Carlota Claver al mando de los fogones. El pack The Bonfire tiene un precio de 85€.

Fire cuenta en sus aledaños con Heatwave, su terraza con apetitosas vistas al Mediterráneo

Además, Fire cuenta en sus aledaños con Heatwave, su terraza con apetitosas vistas al Mediterráneo que invita a un refrescante chapuzón en su piscina tras una apetitosa comida. Se trata de una opción idónea para aquellos que hayan vuelto a la ciudad, se resistan a enfrentarse a la vuelta a la rutina y quieran practicar el staycation.

Esta propuesta, diseñada por Delicato, cuenta con un menú de 45€ que incluye el dúo de ostras Amouse Bouche, una selección de entrantes como el ya conocido puerro a la brasa y el refrescante carpaccio de sandía, un plato principal a escoger como por ejemplo el solomillo ecológico, el rodaballo salvaje o el arroz meloso de pato al horno de leña, un postre a escoger entre la tarta tatin de manzana con crema inglesa y helado de vainilla o la tarta de queso al vapor caramelizada con albaricoque y dos copas de vino. La guinda del pastel es el acceso a la WET DECK post-comida y 3h de parking gratuito. Así, Fire se presenta como un resort ubicado sobre el Mediterráneo del que disfrutar tras un apetecible paseo por la Barceloneta, que permite vivir un ambiente único creado a medio camino entre los locales y los huéspedes del hotel.