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Raquel Bueno

Está de más decir que en las circunstancias actuales lo difícil es no volverse loco. Que nuestra salud mental peligra –la mía desde luego–, y resulta francamente complicado que uno no se sienta tan emocionalmente náufrago bajo el repentinamente claustrofóbico ecosistema de su hogar como aquel hombre (Luis Alejandro Velasco, se llamaba) que estuvo diez días a la deriva en una balsa mecida por el mar Caribe y cuyo relato quedó inmortalizado para siempre por la soberbia pluma de uno de mis escritores favoritos, Gabriel García Márquez.

Dadas las circunstancias, ¿por qué no ayudarnos unos a otros convirtiendo este club de lectura, temporalmente, en un compromiso semanal?

Pero lo peor no es estar encerrado; hemos aceptado nuestra responsabilidad social y no nos resulta del todo incómoda nuestra nueva posición como héroes por un día (o bueno, más bien quince… y los que sigan). Lo peor, como iba diciendo –¿véis lo que os decía de mi salud mental?–, es esta nueva presión social que prácticamente nos obliga a aprovechar hasta el último segundo de este insólito tiempo libre: que si visitas virtuales a museos, que si clases de yoga, videollamadas, conciertos por streaming, documentales, películas, series, libros… La verdad, no doy abasto.

Y es que yo, que entre tanto trabajo no he visto todavía ni un minuto de ese glorioso prometido tiempo libre, me siento extrañamente más socialmente abrumada que nunca. Doy por hecho que muchos de los que estáis leyendo estas líneas (y os agradezco sinceramente que hayáis llegado hasta aquí) me entenderéis. Así que disculpadme de antemano que lo utilice como terapia, y dejadme proponeros que nos ayudemos un poco más –si cabe– unos a otros convirtiendo nuestro preciado club de lectura, temporalmente, en un compromiso semanal. Así al menos, cuando la ansiedad ataque, nos encontrará con la cabeza metida entre libros.

Aquí el de esta semana, vamos allá:

Quién de nosotros, de Mario Benedetti

© Raquel Bueno

Quién de nosotros, de Mario Benedetti (1920-2009), es una novela corta (de 108 páginas) que me recomendó una de mis mejores amigas hace ya unos cuantos años. Por un motivo u otro hasta ahora no me había decidido a leerla, y puedo aseguraros con la mano en el corazón que lamento el tiempo perdido fuera de sus páginas. Esta obra, basada en la historia de un triángulo amoroso –el que forman en este caso Miguel, Alicia y Lucas–, es utilizada por su autor para ofrecernos una imprevisible e irónica exploración de la soledad humana. Una exploración con un final abierto que se resumirá en la última frase del libro: “Quién de nosotros juzga a quién?”.

Quién de nosotros fue, también, la primera novela de Benedetti. Una aparición altamente celebrada por la crítica, que calificó la obra como el libro más prometedor que la literatura de ficción uruguaya había producido en aquel momento. Si, al igual que una servidora, podéis admitir con cierto grado de vergüenza que hasta ahora no habíais leído nunca al célebre escritor uruguayo –que cuenta a sus espaldas con más de 80 libros de poesía, novelas, cuentos y ensayos–, os aseguro que tras leer esta breve novela no querréis dejar de hacerlo. Poneros manos a la obra y me contáis dentro de una semana por Instagram.