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¿A quién no le gusta esa grata sensación de relajación que provoca el suave balanceo de una mecedora? Seguro que a más de uno le lleva de vuelta al pasado, o le vienen imágenes de sus mayores descansando apaciblemente sobre este especial asiento. La mecedora ha formado parte de nuestras vidas y, lejos de caer en el olvido, sus funciones sedantes consecuencia de su perspicaz diseño -donde la gravedad hace todo el trabajo-, hoy en día se reinventa con propuestas divertidas y para todos los gustos, sacándole ese anclaje de otros tiempos. Mecedorama es un buen ejemplo de ello. Esta pequeña firma está especializada única y exclusivamente en reivindicar la mecedora como elemento fundamental en nuestras vidas, pero siempre con un diseño renovado, cuidado, y construida con nuevos materiales. Su última colección en colaboración con La Casita de Wendy es una verdadera maravilla.

Esta pequeña firma está especializada única y exclusivamente en reividicar la mecedora como elemento fundamental en nuestras vidas.

En Mecedorama se fusionan las prácticas tradicionales de la contrucción de mecedoras, con el diseño más puntero. En palabras de sus ideologos: «Mezclamos las enseñanzas de Rogelio, un artesano de la Guajira colombiana, y las inquietudes de Lys Villalba, María Mallo y Juanito Jones (alma maters)». El resultado son preciosas mecedoras realizadas íntegramente a mano, y con la ventaja de poder hacerlas a medida del usuario para mayor conformidad de su siesta y gustos estéticos. En la colección La Mecedora de Wendy las varillas de hierro, que estructuran este especial mueble, quedan revestidas con cinco estampados textiles intercambiables obra de la firma La Casita de Wendy. Así pues, se sustituye la fusta, material que importan de Colombia, y con el que normalmente crean sus mecedoras. Os invitamos a descubrir sus colecciones,y -¿por qué no?- a haceros con una estupenda mecedora. Un método antiestrés infalible que podrás conseguir aquí así de fácil.