OBBIO, el supermercado ecológico más grande de Cataluña, nació hace ya siete años en el número 177 de la calle Muntaner, en Barcelona, en un espacio de 800 m2 que quería dar respuesta a un estilo de vida en auge que buscaba cuidarse y comer sano. Ahora, los amantes de la alimentación ecológica y saludable están de enhorabuena con su nueva apertura en el número 47 de la Ronda de Sant Pere, un espacio y tienda insignia que, más allá de enriquecer el estómago, es toda una obra de interiorismo realizada junto al prestigioso arquitecto y diseñador Stefano Colli. F: Todas las imágenes cortesía de OBBIO

Dentro del espacio del supermercado el producto fresco adquiere un total protagonismo: carne, pescado y, sobre todo, fruta y verdura reinan en un espacio con un total de 8.000 referencias

Tras el éxito obtenido, OBBIO comienza su expansión en la Ciudad Condal con este nuevo espacio en el corazón de Barcelona que suma 700 m2 a los ya existentes hasta la fecha. Además de las características que llevan diferenciando a OBBIO de su competencia durante años, como un rincón child friendly para los más pequeños, su propia panadería o una zona de librería con las últimas novedades editoriales sobre alimentación, el nuevo supermercado incorpora muchas de las cosas aprendidas durante su actual trayectoria; como un grifo para degustar kombucha recién tirada o almond butter hecha al momento (y buenísima, todo hay que decirlo).

Asimismo, en OBBIO “se realizan degustaciones y se imparten cursos de manera periódica, ya sea sobre un ingrediente específico o sobre grupos de alimentos o tendencias alimentarias”. Así lo explica Elena Díaz-Morera, socia fundadora junto a Irina Costafreda, pero la cosa no acaba aquí: ambos supermercados cuentan también con nutricionistas para acompañarte durante tu proceso de compra y, al contar con su propia cocina, puedes también desayunar y comer a mediodía (una circunstancia que, a su vez, amplía la oferta a platos preparados para llevar con ingredientes integrales y ecológicos).

Como es de esperar, dentro del espacio del supermercado el producto fresco adquiere un total protagonismo: carne, pescado y, sobre todo, fruta y verdura reinan en un espacio que también ofrece una gran variedad de cereales, legumbres y frutos secos a granel, pan, dulces, congelados, conservas, los maravillosos productos de Ferment 9 (e incluso algunos customizados) y aceite de oliva, pilar fundamental de la dieta Mediterránea, que se convierte en este segundo supermercado en la niña de los ojos de la casa, con 8.000 referencias en total. También cuenta con alimentos macrobióticos y sin gluten, para diabéticos o intolerantes a la lactosa, una parte de cuidado personal con productos de higiene, cosmética y perfumería y –punto a favor– una gran variedad de productos para luchar contra el plástico y zero waste. En una palabra: fantasía.