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Hace unos días Santiago Abascal , el líder de Vox, pinchaba el himno de España en el Teatro Barceló de Madrid, en el que cientos de teenagers fachas (un 90% eran hombres) se aglomeraban en torno al nuevo mesías de la derecha. «Dj Santiago Abascal» amenizaba así la fiesta que había organizado por el segundo aniversario de ‘Cañas por España’, las juventudes de Vox. Desde que el partido se formara hace seis años, Abascal aboga sin descanso por la derogación de la ley contra la violencia de género, que fuera aprobada en 2004 por unanimidad en el Congreso. Defiende que una ley no puede establecer penas más duras hacia los hombres porque «no habría una igualdad de condiciones ante la ley». Abascal y sus seguidores parecen obviar que hay una discriminación estructural per se hacia las mujeres y los sujetos disidentes tanto en España como en la sociedad global y que, por tanto, las medidas de discriminación positivas son necesarias en la ruta de la igualdad efectiva.

Yo y mis compañeras pararemos el sistema productivo y de cuidados en las ciudades, en los pueblos y en el campo

Abascal y su gente están llenando autobuses, estadios y discotecas. Se han convertido los nuevos beatmakers de la política española y, entre otras cosas, pretenden eliminar del mapa una ley que recoge algunas de las necesidades que atraviesa la mujer en la sociedad, en la que el machismo es una pauta cultural. En 2018, 47 mujeres fueron asesinadas a manos de sus parejas o exparejas. Ya van 8 en lo que va de año y 983 desde que empezaron a contarse en 2003. Pero estos beatmakers no son tan nuevos. Siempre han estado aquí: en cada parroquia, pero también en cada escuela, en cada juzgado, en cada rectorado, en cada redacción, en cada ministerio o en cada ayuntamiento. Porque el fascismo no fue extinguido en una transición democrática que no llegó a existir. Y mañana haré huelga porque quiero sumarme a esta marea que desde el año pasado está intentando parar un sistema productivo y de cuidados que no sería la estructura que es sin nosotras. Un sistema productivo y de cuidados en el que nuestro esfuerzo se invisibilidad a diario. Y parte de mi motivación de hacer huelga, será ofrecer acción y respuesta contra la creciente hegemonía de una extrema derecha machista, homófoba, racista, xenófoba, catalanófoba y vascófoba.

Ya van 8 mujeres asesinadas a manos de sus parejas y exparejas en lo que va de año, y 983 desde que empezaron a contarse en 2003

La de mañana es una fecha marcada en el calendario en la que tiene lugar una reivindicación con un sesgo occidental que, de forma paulatina ha ido extendiéndose por todo el mundo. Y me sumaré a la huelga porque soy de clase obrera y quiero denunciar no solo a la brecha salarial del 20% que existe entre hombres y mujeres, también la infrarepresentación de la mujer en diversos sectores productivos, más allá del creativo, así como la precarización de los sueldos en los trabajos enfocados a los cuidados. A lo largo de la historia hemos sido apartadas del mundo del arte, la ciencia y la cultura; y, en la actualidad, techos de cristal en este y otros ámbitos productivos brillan como nunca. Yo y mis compañeras pararemos el sistema productivo porque los y las trans sufren una triple discriminación a la hora de acceder a un puesto de trabajo en España. Y también haré huelga de consumo en apoyo a todas esas mujeres que no pueden hacer huelga porque han recibido amenazas de despido por parte de sus jefes. Haré huelga para sumarme a la lucha de las temporeras de Huelva, que sufrieron duras condiciones laborales y abusos sexuales en la campaña de la fresa. Haré huelga porque la paz que el poder denomina como social, se basa en generar una brecha estructural contra y entre nosotras. Haré huelga porque quiero visibilizar que la idea de familia nuclear que la derecha pretende inculcar con sus políticas es tóxica, homófoba y apestosa.

Yo y mis compañeras haremos huelga porque no seremos las criadas del sistema patriarcal una vez más.  Os dejo con solo algunas de las millones de voces que se sumarán a la resistencia feminista mañana:

Alba Cros, 27 años. Directora de cine

Pues yo sí que haré huelga, para mi es importante que las que podemos hacer huelga demos voz y representemos a quién no puede hacerlo. Y la huelga es necesaria para visibilizar todo el trabajo que realizamos y que está invisibilizado y tratado con desigualdad.

Begoña Gómez, 38 años. Periodista freelance, colabora en Vogue, Icon, Vanity Fair y La Vanguardia

Por tres motivos:

Y muchos más.

Helena Matamala, 32 años. Realizadora

Haré huelga. Creo que es importante poder reivindicar desde el feminismo un cambio del sistema capitalista que nace fruto del sistema patriarcal y que se sustenta en gran parte por el trabajo invisibilizado y de cuidados de las mujeres. La opresión patriarcal perpetua el capitalismo, por eso no le conviene la revolución feminista.

Águeda Amiano Vergara, 34 años. Directora de Moda en Pelonio

Yo paro porque es necesario. Paro por #1000motivos. Porque como mujer empoderada es mi obligación. Porque nos amenaza el neofascismo. Porque nos están asesinando. Porque si mañana me pasa a mi, quiero ser la última. Porque #yositecreo. Porque el sistema patriarcal nos ahoga en pleno siglo XXI. Paro por mi, por ti, por nuestras hijas. Porque el futuro será feminista o no será.

María El Problema, 33 años. Gestora cultural y música

Con la huelga demostramos el valor de nuestro trabajo menospreciado durante siglos, y además nos damos fuerza unas a otras, sintiendo esa energía común que desatan todas las mujeres del mundo, y que tanto necesitamos para luchar cada día contra el patriarcado.

Laia Arqueros, 33 años. Artista 

Entre mil motivos haré huelga porque cuando el 90%de mi alumnado son mujeres solo hay un 6, 1% de mujeres españolas representadas en arco 2019. Artistas, claro. Porque estoy cansada de que hablen de mi obra como arte femenino y no feminista.

Laura Martínova, 33 años. Realizadora

Yo soy freelance y sí que haré huelga, porque me parece muy importante apoyar la causa para conseguir igualdad real entre hombres y mujeres a nivel laboral.

Aida Cabrera, 40 años. Directora de Comunicación y Marketing de Palomo Spain

Yo me uno a la huelga porque estoy harta. Desde que soy pequeña veo y siento las diferencias. Y desde mi posición “privilegiada” he visto cómo las mujeres somos minusvaloradas, maltratadas y ninguneadas. Porque nuestro criterio se pone en cuestión solo por por ser nosotras, y esto no puede seguir así. Basta ya. Igualdad.

Irene Desumbila, 33 años. Periodista

Haré huelga por todas aquellas mujeres que han sufrido y sufren violencia machista, por todas aquellas que han muerto ASESINADAS a manos de sus parejas o exparejas, por todo el machismo inherente e instrumentalizado que aún reina nuestra sociedad, y por tantas otras de sus consecuencias.

Alicia Padrón, 32 años. Estilista

Hago huelga pero no desde la crispación la hago a través de la solidaridad y el Amor. Hago huelga pero no desde la individual subjetiva la hago porque leo, escucho y comparto la objetividad colectiva. Hago huelga porque no creo en otra vía para ser mujer que compartir este día con todas ellas.

Txe Romeiser, 27 años. Artista y profesor

Yo no iré a currar y secundaré la huelga (no avisaré con antelación que no iré) porque siguen escuchándonos a medias, todo a medias y mal. Porque falta mucho curro y necesitamos este día para sentirnos juntxs y que podemos seguir luchando y cambiando la mierda de sistema. Y necesitamos sentirnos manada y sabernos muches frente a las políticas del odio y la individualización.

Marta Nieto, 32 años. Gestora cultural

¡Haré huelga! Por un mundo en el que no se tome por universal la experiencia masculina.

Zaida Carmona, 33. Comunicadora

Yo hago huelga porque nos matan y porque nos violan, porque no quiero tener miedo. Hago huelga por las mujeres migrantes, por las mujeres trans, por las lesbianas, hago huelga porque no hay igualdad real. Hago huelga por todas las que han luchado antes que yo y por todas las que vienen. Porque quiero una economía de los cuidados porque haré lo que haga falta para ir destrozando poco a poco este patriarcado capitalista y neoliberal junto a todas vosotras.

 

Maia Jeckinson, 33 años. Casting associate

Hago huelga. Por una igualdad real y no ficticia. Porque queda mucho trabajo que hacer. Por todas las mujeres maravillosas de mi vida.

Alex Martínez, 37 años. Pintora

Voy a hacer huelga porque esto es insostenible, porqué me da vergüenza vivir en una sociedad asquerosa e insistentemente machista, porque no soporto la condescendencia de los tíos, ¡¡por hartazgo y por lucha!! La manada som nosaltres!!!!!

Carlota Mir, 27 años. Comisaria de arte

La huelga del 8 de marzo es una de las pocas estrategias de retirada – de no productividad – que hemos conseguido mantener y reactivar pese a la creciente amenaza de la ‘celebración de la feminidad’ que se quiere llevar a cabo desde las instituciones del patriarcado (nada más instructivo para entender a qué me refiero como que leer el decálogo antifeminista del ‘feminismo liberal’ lanzado por C’s con motivo del Día Internacional de la Mujer). Como productora cultural feminista y queer, haré huelga porque estoy harta de que las instituciones culturales y gubernamentales se acuerden de mi el 8 de marzo y la semana del Orgullo, pero el resto del año, bien por cobardía, bien por privilegio, bien por ignorancia, o bien por miedo, sigan llevando a cabo políticas nocivas, excluyentes y extractivas que tienen graves consecuencias sobre nuestros cuerpos, relaciones y entornos de posibilidad. No podemos permitir que las instituciones utilicen la energía creativa y cuidadora de las mujeres y otras minorías sexuales y racializadas a modo de ‘insignia progresista’ mientras mantienen políticas que invisibilizan y precarizan nuestra cultura y nuestro trabajo y mantienen los modos de gobierno (de dominación, violencia, jerarquía y competitividad) propios de la sociedad patriarcal.

Ana Uslenghi, 33 años. Crítica de cine

Hago huelga porque, aunque no sé si la más efectiva, es una de las herramientas para plantarle cara a este régimen heteropatriarcal y capitalista. Hago huelga porque creo en el feminismo como movimiento político que puede y debe construir nuevas realidades, y deconstruir cualquier hegemonía imperante.

Plisotic, 35 años. Artista y profesora

Hago huelga porque mi abuela no pudio hacer huelgas, mi madre jamás se pudo plantear que ella pudiese hacer una huelga, y soy plenamente consciente de la necesidad de participar para conseguir el cambio y la mejoría. Yo hago la huelga porque puedo hacerla y siento que tengo el deber de hacerla.

Uge Pañeda, 38 años. Psicóloga y productora musical

Sí, la haré. Porque es absolutamente necesaria hasta que la sociedad sea feminista y se convierta en una realidad la igualdad de derechos y oportunidades entre hombres y mujeres.

Aida Belmonte, 26 años. Periodista musical

Para protestar contra el sistema de trabajo que desde siempre da y quita privilegios al son del patriarcado. Y para demostrar a los machirulis que sin las mujeres no se va a ningún lado.

Nora Hadad. 27 años. Artista sonora 

Si, sí voy. Por todas aquellas mujeres que no pueden dejar sus puestos laborales. ¡Es necesario la visibilización de la reproducción y producción que representamos!

Alexa Barrios, 26 años. Ilustradora

Hago la huelga porque siento que falta mucho para que las supuestas condiciones de igualdad se cumplan. No es solo reivindicar lo que no está legislado, sino lo que aún no se aplica como se debe. Para mí es un golpe sobre la mesa, con nuestra voz como arma.

Sara Merec, 40 años. Artista audiovisual

Haré huelga por aquellas mujeres que no pueden hacerla. Haré huelga porque creo que nos enfrentamos a un punto de inflexión; lo conseguido hasta ahora está más en peligro que nunca. Haré huelga desde un feminismo interseccional. Acudiré a la convocatoria, pero creo que no basta con salir un día a la calle. La política tiene que formar parte de nuestras acciones diarias. Meditemos sobre lo que significa la sororidad, pero en serio.

Suss Serrán, 28 años. Consultora en agencia de comunicación

Cuando la violencia machista, el acoso a las mujeres y las desigualdades dejen de ser realidades palpables ya repensaremos como segur defendiendo nuestros derechos. Mientras tanto, hago huelga porque me parece importante para visibilizar que somos muchas y la lucha sigue.

Julia Abalde, 30 años. Ilustradora

Sí que haré huelga! Y precisamente he estado pensando mucho sobre las razones. Se me ocurren 3 principales: 1) El poder se ha construido dobre el soporte que proporciona el trabajo tradicionalmente feminizado, a la vez que lo invisibiliza y lo marginaliza. Esto implica los cuidados domésticos y familiares, pero también manifestaciones artísticas como la tradición oral de cuentos, la crianza, o labores de artesanía en el hogar. Creo que visibilizar y reivindicar la importancia de esas prácticas también supone transformar el paradigma de lo que entendemos por “poder”. 2) Venimos de una historia en la que las categorías de género son innecesariamente rígidas, con una división arbitraria de roles, atributos, deberes y derechos. Creo que esta concepción del género implica una reducida libertad en los individuos a la hora de desarrollarse plenamente, además de una fuerte discriminación hacia quien no se adscriba en dichas categorías. 3) El feminismo cuestiona. Desafía lo que se considera natural e inamovible y pregunta: Por qué las cosas son así? Podrían ser de otra manera? Creo que acostumbrarnos a hacernos estas preguntas nos sirve para mantenernos dueñas de la vida que vivimos. Luego habría una cuarta razón que sería que considero que es el movimiento con mayor potencial transformador que está ocurriendo en este país. Y me interesa esa transformación. Y una quinta y última, aunque tal vez sea la primera: soy feminista porque he visto a mis abuelas, a mi madre, a mis compañeras y a mi misma sosteniendo situaciones injustas y desiguales, y soportando que culturalmente esa injusticia se justificase.

Cristina Moreno, 27 años. Periodista

Este año, al igual que en 2018, me sumaré a la huelga feminista e iré a la manifestación porque estoy cansada de ver a las mujeres en los puestos más precarios y peores pagados. Porque todavía hoy la persona que viene a mi oficina a limpiar cada semana es una mujer. Además, durante mi trayectoria profesionales he sufrido tantos desplantes por ser mujer, tantos prejuicios… Es hora de ponerle el cascabel al gato un año más sumándonos a esta jornada de huelga.

Y para caldear los ánimos y hacer del 8 de marzo un día aún más ameno, podéis ver el vídeo que Rocío Quillahuaman ha hecho de la Jota de la Huelga de las Ajuar. También he elaborado una playlist que encontraréis más abajo. Porque las beatmakers siempre hemos sido nosotras:

 

//Ilustración de la portada: Alexa Barrios.

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