Weekly Discovery: Lim Kiihwan, a todo color
Tras tres años trabajando como diseñador gráfico y de video, el joven ilustrador coreano Lim Kiihwan, con base en Seúl, decidió darle un cambio de rumbo a su vida. Hasta entonces, el dibujo había constituido únicamente un hobby para él, pero decidió lanzarse a la piscina y convertido en su profesión para el deleite de muchos. F: Todas las imágenes por cortesía de Lim Kiihwan
Las ilustraciones de Kiihwan surgen de las trazadas del humilde rotulador, y tienden a registrar los paisajes de su vida cotidiana y los diferentes destinos de sus viajes
Tal y como el artista relata a la revista It’s Nice That, había soñado desde pequeño con un trabajo que le permitiera dibujar todo el día. Sin embargo, a causa de su ambliopía de color –una condición que reduce la agudeza visual debido a una lesión en el ojo– no creyó que este sueño pudiera llegar más allá de un simple pasatiempo. Su mirada para el arte, sin embargo, se vio reforzada por esta condición, que convirtió su estilo de dibujo en algo realmente singular.
Las ilustraciones de Kiihwan surgen de las trazadas del humilde rotulador, y tienden a registrar los paisajes de su vida cotidiana y los diferentes destinos de sus viajes. Propenso a la nostalgia y al agridulce sabor de boca que el final de éstos nos deja en más de una ocasión, Lim extiende su vida a través de la ilustración y los inmortaliza a través del arte. Esa es para él, precisamente, la fuente más valiosa de inspiración.
En sus dibujos, el protagonista es solo uno: el color, cuanto más intenso mejor, que paradójicamente se nos aparece suave como la seda. Así, su obra –del todo única– se acerca al pop art americano en el marco de la ilustración contemporánea, en todo el esplendor de su vivacidad. Una dosis de inspiración perfecta para esta jornada de domingo. Rise and shine!