Hace poco más de un año Olga y Alejandro, dos jóvenes que trabajaban en el sector del fast fashion, decidieron abrir Yes Future, un supermercado que pone en práctica la filosofía zero waste, promoviendo con rigor la ausencia de plásticos en sus envases. 

Miel, pan cerveza artesanal, vinos ecológicos, vermut, aceite, galletas, cereales… En este paraíso del granel, el consumo feliz es posible

Entro en Yes Future alentada por un letrero luminoso situado en la acera que dice «Fuck Plastic», y saludo a Alejandro, que me recibe con una sonrisa y me anima a echar un vistazo al establecimiento.

En la caja encuentro cepillos de dientes de bambú y  pajitas de acero, que me recuerdan a la iniciativa Bye, bye straws, impulsada por las madrileñas Sara Navarro y Ajo Fernádez, que denuncian el impacto ecológico que tienen las pajitas de plástico que encontramos en los bares.

Las pajitas -o yendo más allá, los pellets/nurdle, las bolitas de 3 centrímetros de diámetro a partir de las cuáles se fabrica el plástico- cuentan con una corta de vida de uso, nunca se degradan y van a parar a los mares, afectando de forma alarmante al ecosistema y la fauna marina.

Avanzo un poco y avisto un auténtico paraíso del granel: miel, cerveza artesanal, vinos ecológicos de la terra, vermut, aceite, galletas, cereales, gran variedad de frutos secos y especias o alimentos como la espirulina. En Yes Future tienes todo los productos básicos que te pudieras imaginar, también productos de limpieza y de aseo personal. No me puedo resistir y echo a mi canasta un trozo de oloroso jabón artesanal y una pastilla de champú.

También están disponibles champús líquidos, que puedes rellenar en el envase que traigas de casa, o bien puedes emplear unos recipientes de acero inoxidable que están disponibles a la venta, junto con bolsas de papel o envases de plástico biodegradable, como los que puedes encontrar en la sección de limpieza, que cuenta con grifos de lejía, suavizante, detergente o limpiador de suelos. La mayoría de los productos los obtienen de cooperativas locales.

Gracias a proyectos como Yes Future, los vecinos de Sant Antoni -y de otros muchos barrios- están tomando conciencia de lo importante que es cambiar el mundo desde el consumo propio y la corresponsabilidad de todas. Hacía mucho tiempo que no entraba en un local que me despertara tan buenas vibraciones. Y es que un consumo sostenible y responsable con el medio ambiente es posible gracias a proyectos como este.