Nace el Bar Pimentel, un lugar con espíritu viejoven que, aunque con alma de antiguo, resulta en una bocanada de aire fresco para un barrio al que a menudo le cuesta tratar con cariño a sus locales. Una cocina clásica y casera en constante colisión con las técnicas más contemporáneas con un objetivo claro: el de hacer una oda a la gastronomía y cultura españolas. Old school, joven, canalla e impregnado de muy buen rollo; así es el bar cuyo logo representa el ya queridísimo señor Chujo Pimentel -el abuelo de la cabeza pensante y líder de este proyecto, Martín Pimentel-. F: Todas las imágenes cortesía de Bar Pimentel © Sara Lomas.

En el lugar colisionan la cocina más clásica y el toque justo de vanguardia a los fogones

En su casa, tanto Chujo como su mujer siempre tenían las puertas abiertas para que todos sus amigos fueran a charlar y pasar el rato, y ambos cocinaban y preparaban deliciosos cócteles. Esas recetas son ahora insignia del Bar Pimentel, donde la oferta gastronómica empieza en la vitrina que da la bienvenida al comensal en la entrada, y resguarda maravillas como sus deliciosas zamburiñas gallegas con tomate confitado, todo tipo de gildas, ostras, mejillones servidos posteriormente al vapor con citronella, coco y lima kaffir, o las almejas.

Desde platillos tradicionales con un twist actual -como el salmorejo cordobés con huevo y jamón ibérico o el empedrat de judías de Santa María con bacalao– hasta platos más contundentes -como los canelones de pollo y trufa o el refinado huevo poché con parmentier de patata y torreznos-, la cocina tradicional made in Spain de El Pimentel ofrece muchas propuestas de lo más suculentas. Los canelones de pollo y trufa, la pluma ibérica con patatas y pimientos del padrón, las albóndigas con sepia, el bacalao al pil-pil, el atún soasado con tomate confitado y aguacate, la corvina asada con bimi con su salsa beurre blanc, la tortilla de patatas con cebolla…podríamos estar aquí días, pero te lo resumimos: en este restaurante sentirás esa felicidad de estómago que solo sientes en casa.

Bar Pimentel propone maridar esta retahíla de sabrosos platos con una selección de vinos hecha con mucho cariño, entre los cuales se encuentran algunos naturales, o opciones más cerveceras como la Turia de tirador, la Cyclic Beer Farm o la Caravelle, y cócteles de creación propia para coronar la experiencia.