Por mucho espíritu yankee que pretendamos respirar, la estética europea sigue ganando por goleada a la hora de elegir restaurante para cenar (o comer). Y cuando hablamos de estética, no solo nos referimos  al diseño interior del local en cuestión sino a la imagen de todo aquello que nos puedan ofrecer. Desde el propio servicio a la decoración, terminando en los platos a degustar. USA 0 – Europe 1. Pero si además no solo buscas la quintaesencia de nuestra propia idiosincrasia como continente y pretendes que te sorprendan (y comer bien, ya de paso), el restaurante Copenhagen es el idóneo para todo esto y mucho más.

Uno de los éxitos de Copenhagen es la exhaustiva búsqueda de auténticos productos vegetarianos cuyo sabores son difíciles de olvidar

Geolocalizado en el cogollo más trendy del barrio de Salamanca y con una estética que no puede negar que bebe del diseño más escandinavo, Copenhagen no es un restaurante que abrace únicamente la cocina del país que le da nombre. Su estética europea y pulcro minimalismo responden al único interés de acercar la gastronomía más healthy tanto al cliente que está a plan como al que está cansado de las pesadas digestiones.

Una cocina interesada por fusionar las cocinas vegetarianas del mundo entero de una manera vanguardista y atendiendo a los mejores sabores y texturas que amarán los veganos y los ovolactovegetarianos e iniciarán a aquellos que interesados por esta nueva manera de paladear se entregan abiertos de mente a la nueva experiencia.

Un restaurante que apostando por el producto de temporada y ese equilibrio entre lo que está rico y lo que, además, es sano deja opciones tan delicadas como las croquetas de boletus y avellanas tostadas, el paté de pimiento rojo asado y aceituna verde con crudités, las gambas vegetales al ajillo, el guacamole mediterrénao con nachos y yuca frita, la ensalada de algas con ramallo de mar, el enrollado de berenjena con queso Scamorza, la hamburguesa de soja con tomate seco y cebolla caramelizada, la pasta fresca rellena de calabaza o la thai de fideo udón y verduras al wok. Platos que no nos quitan las ganas de endulzarnos con sus bombones de chocolate de algarroba con helado de pecán o una crema inglesa vegana con manzana en tres texturas con la que es difícil no gozar por pecaminosa.

¿Te has quedado a medias? Será mejor que vayas y lo conozcas de primera mano… o de primer bocado.