En apenas tres años –nada fáciles además– Denassus ha conseguido establecerse como un lugar de cabecera entre los amigos del combo formado por una buena copa de vino natural y un sabroso platillo de autor elaborado con producto de calidad. Un bar à vins amigo de adjetivos como natural o proximidad, que eleva la oferta de Poblesec. Un lugar de peregrinación obligado para los detractores de los sulfitos y los amantes del comer bien. F: Todas las imágenes cortesía de Denassus
Denassus trata con producto natural y de proximidad, mientras eleva la oferta de Poblesec
El motor de Denassus lo enciende a diario el tándem formado por Alejo Mailán y Sergi Ruiz, grandes apasionados y conocedores del mundo de la gastronomía ligada al vino, y viejos conocidos de la escuela de sumillería ESHOB. ¿Su objetivo? Crear a un espacio donde tomarse la vida con un poco más de alegría. Creemos que lo han conseguido y con nota.
Denassus sacia las ganas del buen comer y beber con una carta dinámica y contemporánea que aboga por el producto de temporada y el Km0. Esta filosofía se traduce en platillos que representan la gastronomía catalana pero que hacen también un guiño a otras culturas y países. Una comida en Denassus puede empezar, por ejemplo, con una ostra Amelie acompañada de unas croquetas de pollo rustido y queso o de pato Pekín, así como de su propia versión de las bravas.

Denassus cuenta con una carta dinámica y contemporánea que aboga por el producto de temporada y el Km0
La carta sigue con platillos para compartir como el ceviche de corvina salvaje, el puerro a la brasa con vinagreta y ágave o su tortilla trufada; para seguir con sus platos de cuchara y servilleta. Los callos con morro y sus apóstoles, el pulpo, el brioche de pull pork o el fricandó con setas son ya best sellers de su breve pero sabrosa carta. Además de los platos que cada día se sirven fuera de carta, y por los que vale la pena preguntar, es recomendable no saciar el apetito antes de la hora dulce. Postres como su cheesecake o el tocinillo de cielo con helado de palomitas son los responsables de tan sabia decisión.
Un interior agradable y con aires bohemios, y una carta breve y acertada, es el escenario perfecto para llevar a cabo la misión de Mailán y Ruiz en el Denassus: democratizar el mundo del vino obviando el mínimo atisbo de esnobismo. Para descubrir de forma desenfadada y con muy buena predisposición, el 90% de su carta líquida está compuesta por pequeños elaboradores, que cuentan aquí con un escaparate al mundo al que a veces es difícil de llegar.

La misión es democratizar el mundo del vino obviando el mínimo atisbo de esnobismo
Con referencias sobre todo de variedades autóctonas –ya sean locales o de un país lejano– Denassus cuenta con una bodega repleta de vinos ecológicos y biológicos, provenientes de agriculturas biodinámicas, sin olvidar tampoco propuestas más convencionales. Además, la carta rota a menudo, para que los amantes del buen vino siempre puedan descubrir nuevas referencias en su visita a este encantador bar à vins de Poblesec.
Comer o cenar en Denassus costará entre 25€ y 35€, siempre dependiendo de la sed del comensal y de cuánto alargue las sobremesas en este agradable lugar.