El rollo ‘eco-chic’ cuenta cada vez con más adeptos en la ciudad: gente que busca productos naturales y ricos en un ambiente bonito y agradable. Desde 2011 el barrio de las letras cuenta con un claro ejemplo con el café La Mojigata.

El local es pequeño y está decorado con sumo cuidado y gusto, en tonos claros y con antigüedades. El horario es amplio, por lo que su oferta gastronómica también lo es. Para empezar bien la mañana tienen desayunos a base de productos caseros con un gran surtido de tartas, bizcochos, fruta con yogur o muffins. Los domingos tienen lo que ellos llaman desayuno tardío, donde además ofrecen tortitas, huevos o ensaladas. Y si la noche ha sido muy dura y no te ves con fuerzas de salir de casa, ahora tienen servicio de desayuno a domicilio con periódico incluido. En La Mojigata todo es ecológico e incluso a la hora de escoger la leche puedes encontrar la de vaca, soja o avena.

A mediodía tienen un menú por 8,95 basado en legumbres, verduras, hortalizas y cereales. Los viernes incluyen platos de carne ecológica. La carta va cambiando cada dos meses, aunque si te pasas a cenar es probable que te encuentres con platos como la hamburguesa de salmón al horno con ensalada de calabacín y salsa de yogur y hierbas aromáticas. Suena bien, ¿no? Cenar te costará entre unos 15 o 20 euros. Para beber siguen la misma línea con vinos y cervezas ecológicos, sin renunciar a la moda de los cócteles hechos de frutas o el gintónic, elaborado con ginebra ecológica.

Si eres aficionado a la cocina pregunta por sus cursos, como por ejemplo el de muffins y cupcakes, para convertirte en un auténtico pastelero. Como must, las mascotas son bienvenidas y en la entrada hay un bebedero para ellas.