El hecho de que Monster Sushi sea la opción de delivery japonés más fiable de la ciudad, desde que abrió en 2018, no es algo gratuito. Fabiola Lairet y Ricardo Figuera ya llevaban casi una década sirviendo delicias asiáticas en su homónimo de Gala Placidia, para abrir, hace apenas tres años, el Robata, otro restaurante japonés centrado en la parrilla con una naturaleza más elegante. Con este currículum, nada podía ir mal.

Fabiola, venezolana de nacimiento, se encarga de que todo salga a pedir de boca. Ella misma estudió cocina en Los Angeles y Japón y viene de un continente donde la comida japonesa es toda una institución desde hace 30 años. Con este expertise, es normal que su nivel de exigencia sea elevado, hasta el punto de que es ella misma la que elabora cada una de las recetas, puesto que no hay chef que dé con la perfección a la que ella quiere llegar con cada nigiri.

Siempre con la sencillez que abandera la cocina casera, la carta de Monster Sushi es un ejercicio de honradez gastronómica

Puede que Monster Sushi sea algo caro para un delivery al uso, pero también lo es que los detalles se cuidan como en ningún otro. ¿Un ejemplo? Los motoristas son propios -no hacen tratos con Deliveroo, Glovo u otras empresas del sector- puesto que actúan como embajadores del lugar, a la vez que muestran su lado más humano. Su cocina, además, es honesta. Siempre con la sencillez que abandera las recetas caseras, aunque sin perder el exotismo propio de Asia, la carta de Monster Sushi es un ejercicio de honradez gastronómica.

Los pescados de la carta son locales, pero no salvajes. La dorada, por ejemplo, es de granja, lo cual permite cierta trazabilidad; y el atún llega directo desde l’Ametlla de Mar. Para que te hagas a la idea, sus nigiris, sashimis y makis -a escoger entre gran variedad de pescados- se pueden combinar con unas gyozas incomparables, un kushiyaki -brocheta de solomillo de buey con salsa yakiniku- o una ensalada de wakame. No obstante, la carta da gran importancia a lo que ellos denominan ‘los fuegos’, y que se traduce en platos como el pad thai, un suculento spicy beef o un yakimeshi, un arroz salteado con verduritas surtidas y que se puede combinar con pollo, langostinos o buey. Postres como la lemon pie o el carrot cake, así como un packaging divertido y gamberro, dan ese toque urbano que caracteriza a Monster Sushi, sin que esta naturaleza algo canalla le haga perder un ápice de perfección.

Los motoristas son propios, puesto que actúan como embajadores del lugar, a la vez que muestran su lado más humano

El delivery o take away se puede acompañar de la selección de vinos y cervezas que hay en las pocas estanterías de su local, puesto que el 80% de su centro de operaciones es una cocina que funciona de forma frenética. El pedido te costará a partir de 25€, dependiendo siempre del apetito que tengas y de las personas con las que compartas tan apetitoso manjar nipón.