Junto a las Cortes descubrimos Mr Frank, un restaurante que en poco tiempo se ha convertido en el ‘place to be’. El responsable de este proyecto es Paco Ramos, conocido como Frank, que tras pasar muchos años trabajando en la alta hostelería en ciudades como Nueva York y Miami, decidió volver a Madrid y crear un espacio que aunase tradición y modernidad y que combinase buena calidad con precios razonables. ¡Objetivo conseguido!

El local se divide en dos plantas: al entrar hay una buhardilla abovedada de ladrillo visto, que era una antigua bodega del siglo XIX pensada para afterworks y que cuenta con un privado. En sala destaca una bonita mesa alargada de madera y una barra decorada con azulejos hidráulicos. La planta de arriba resulta muy acogedora, con grandes ventanales y palés decorando el techo. Tienen detalles que se agradecen, como sillas antiguas de colegios y teatros, una lámpara de plástico reciclado de PET (el material de las botellas de agua) o cabezas de toro hechas con mimbre.

La carta ha sido diseñada por el chef David Núñez y pensada para compartir. Para empezar, no te pierdas el sorprendente salmorejo de cereza con pistachos repelados, anchoa ahumada y nieve de queso feta. Para continuar puedes disfrutar mucho con el risotto de boletus con queso Idiazábal o una jugosa carrillada. Del mar destacan platos estrella como es tataki de atún con alga wakame y mayonesa de soja o el pulpo braseado con puré de patata y pimentón. Los postres son clásicos pero contundentes y convincentes, como es el brownie con helado de vainilla o el cheesecake.

Comer o cenar cuesta en torno a los 25 euros, mientras que cada mediodía cuentan con un buen menú por 12 euros.

Mr Frank es ideal tanto para cenas con amigos como para veladas románticas, pero acuérdate de reservar porque está causando furor.