Cuando un restaurante alcanza el éxito y la fama, haciéndose con una clientela fiel y un hueco entre la voraz competencia, es fácil pensar que de abrirse otro local bajo el mismo nombre (pero en otra ubicación), es decir, convertirlo en una franquicia pudiera resultar toda una locura. Y es que según dicen, segundas partes nunca fueron buenas pero, como en todo, existen excepciones. Mr. Frank Blue es una de ellas.

Si el primer Mr. Frank (sin el Blue) lleva haciendo 5 años las delicias de los locales del puro centro (más exactamente, los que circulan por la calle Jovellanos y aledañas), para dejarnos engatusar por la cocina dinámica y cosmopolita de Mr. Frank Blue hay que poner rumbo a Majadahonda donde en el Centro Comercial La Bolsa (carretera de Pozuelo) nos topamos con la nueva apuesta gastronómica del grupo Frank Food. Una (re)vuelta a esos productos 100% españoles que se combinan para dar como resultado una cocina auténtica y de lo más variopinta.

¿Quieres que el plan sea mucho más exclusivo? Reserva en su reservado The Library y luego nos cuentas

Un Mr. Frank Blue que no pierde aquel gancho de izquierda (y de autor) de su hermano mayor y que sigue desarrollando ese tremendo interés por los sabores más nuestros, más del mundo, en otro local que exuda espíritu escandinavo de principio a fin. Un restaurante con una carta muy ajustada donde la variedad está más que probada y el sabor es un lujo al alcance de todos.

Una aventura que entre ensaladas de quinoa roja y negra o de bonito con tartar de tomate y garbanzos, tartar de salmón con mousse de aguacate, ensaladilla rusa de pulpo y camarones, ceviche de corvina de rocoto o amarillo, chipirones encebollados al pesto, salmón al miso con miel y mostaza, encocada al curri de rape y camarones, salteado de setas de temporada con foie, risotto negro con langostinos saganaki, provoleta con chorizo, lubina Tikka Masala, entraña sobre huancaína o rib eye argentino con piña asada hacen enmudecer al cliente más sibarita para el que la fiesta no decae en ningún momento.

Un Mr. Frank Blue que se convierte en el perfecto anfitrión para cualquier cita de mediodía o noche y que nos permite terminar con una sonrisa y un buen rollo en todo lo alto cuando brindemos en la sobremesa con cualquiera de sus cócteles de autor. Adoro.