Pocas cosas se disfrutan más, cuando salimos a comer, que una buena carne en combustión. Un delicado bocado para los paladares más carnívoros, que mucho tiene que ver con la materia prima y los tiempos sobre las ascuas. Un dominio del fuego que encontramos en la Parrilla Ríos Rosas, el templo de la proteína en pleno Chamberí. F: Todas las imágenes cortesía de Parrilla Ríos Rosas © Parrilla Ríos Rosas.

Encontrar restaurantes con una buena parrilla no es que sea complicado, es toda una proeza. Por eso, disfrutamos como niñxs chicxs cuando cruzamos el umbral que separa la calle de la Parrilla de Ríos Rosas y comenzamos a oler lo que más tarde comeremos. Un restaurante clásico donde las carnes rojas bien maduradas se han hecho con el protagonismo y el comensal se enfrenta a toda una aventura, según el hambre que lleve.

Ya seas de carnes a la brasa o de bacalao, la Parrilla Ríos Rosas es tu parada obligatoria en Chamberí

Sabores intensos y texturas que se deshacen al paladar, al son de un ir y venir de platos que salen llenos y vuelven a cocina para no tener que pasar por el lavavajillas. Un local donde disfrutar de una comida en familia, una velada romanticona o una cita de trabajo, y que siempre te hará apuntar el tanto al marcador, pues hincarle el diente a una buena carne no es tarea fácil.

Una Parrilla Ríos Rosas donde empezar con un salmorejo cordobés con virutas de jamón ibérico y huevo, unos torreznos artesanos de Soria, unas croquetas caseras de jamón ibérico o buey o la morcilla de Burgos y manzana a la parrilla con salsa del piquillo; seguir con un pulpo a la brasa con mayonesa suave de ajos, el ojo de bife novillo Angus, la presa ibérica con patata asada, una cola de rape a la bilbaína a la brasa con patata panadera, el T-Bone de vaca gallega de 1 kg. con maduración de 35 días o unas zamburiñas a la plancha con aliño de ajos y perejil, y finalizar con una tarta de queso con frutos rojos o un heladito artesanal, para hacer mejor la digestión. ¡Volverás! ¡Ya te digo que volverás!