A partir de ahora, Rioba ya no es solo sinónimo de barrio en lunfardo -el argot que se practica en Buenos Aires- sino también de buen comer. Allá donde Poblesec parece que poder darnos más sorpresas, encontramos este restaurante regentado por dos sospechosos habituales del barrio, el chef Eduardo Marchesi y el cabeza de sala Ekaitz Sáenz de Cámara, bien conocidos por seguir sirviendo platillos sabrosos y pintxos en el Koska de la calle Blai. Este tándem incombustible ha encontrado en Rioba ese punto que acaricia la alta gastronomía sin más pretensiones que servir buen producto, sacando lo mejor de cada ingrediente.  

Este restaurante de pequeño formato -está poblado por unas pocas mesas en un espacio tranquilo y amable- trabaja la técnica para servir platos en forma de cocina de mercado y temporada en los que la brasa y la baja temperatura son las protagonistas. Aunque la cata cambia a menudo, se puede empezar con platos como la croqueta de cochinillo​, la calabaza asada con ricotta​, kale, granada y semillas; la sabrosa tortilla de bacalao skrei​ con cebolla confitada o los raviolis clásicos​ rellenos de espinacas, ricotta, sesos y piñones. No obstante, debemos decir que uno de los hits indiscutibles es la molleja de ternera​ (cocinada a baja temperatura durante 6 horas y finalizada en brasa) con crema de cebolla y tomates cherry.

Rioba está regentado por dos sospechosos habituales de Pobleses, conocidos por servir pintxos en el Koska de la calle Blai

Entre los segundos podemos encontrar platos tan contundentes y bien acabados como la corvina salvaje con puré de boniato, chirivía y brócoli con brotes de albahaca y limón; el pulpo a la brasa con amaranto cocido con tinta de calamar, piquillos confitados y un suave alioli; la papada de cerdo​ con alcachofas de Tudela a la brasa; o el cochinillo con espárragos trigueros y chalotas​.

La carta, breve y sabrosa a rabiar, se acompaña con una carte de vinos corta pensada para maridar una selección de platos muy bien elaborada. Rioba es sin duda el nuevo hit del barrio, un lugar que te hace sentir cual Livingston Supongo de Poblesec.