Muchos piensan que la calidad de las franquicias nada tiene que hacer frente a la de esos originales restaurantes instamagreables como pocos, por donde la gente cool se deja caer, pero si te dijéramos que esa misma gente también disfruta de esas franquicias porque esa idea de defenestrar ese tipo de negocios es claramente errónea, no podemos por más que hacernos con unos boles de comida del Tasty Poke Bar. No te arrepentirás.

Dicen que los sueños si se desean muy fuertemente acaban por cumplirse. Esto mismo les ha pasado a los amigos de la infancia David Salvador y Jaime Farto que dejaron sus carreras para unir fuerzas y dar forma a una idea: crear una empresa enmarcada en el ámbito de la hostelería. De esa idea nacía Tasty Poke Bar, un pequeño local de comida saludable, mucha imaginación y donde precio y calidad están en perfecto equilibrio.

El comer sano está de moda y si es en poke mucho mejor

Una oportunidad de hacer del plato estrella de la cocina hawaiana con fusión en japonesa, el plato estrella para comer en el local o llevar a casa. Comida sana y fresca en bol y con los ingredientes al gusto del cliente que no solo está en la onda de lo que mola sino que pretende cuidar su alimentación.

Una idea sencilla que parte de una base de arroz (cocinado como si fuera el del sushi), quinoa o ensalada y que al combinarse con la proteína (tofu, salmón, pez mantequilla…), marinarse con aceite de sésamo, soja y cebollino, combinarlo con otros ingredientes al gusto como la piña, el aguacate, los edamames o las algas wakames y terminarse con diversas especias y jugos japos crean un manjar para el paladar y una alegría en tiempos de comida rápida, de franquicias que debería ser más controladas. Nada que ver con Tasty Poke Bar.

Un restaurante diferente para sorprender y dejar que nos sorprendan y que dados los beneficios ha permitido que se convierta en franquicia y desde allí al cielo… la chulería madrileña… que como poder (a lo superhéroe no tiene límites). ¡Buen provecho!