Con la Navidad ya casi a cuestas y los planes familiares todavía pendientes de un hilo, pensar en qué vamos a comer en esos días se nos hace un poco complicado. Pero como somos previsores y nos gusta, siempre, quedar estupendamente, la bombilla se nos enciende cuando descubrimos que el restaurante Chirón también ha montado su particular servicio para llevar, y no podemos por más que babear desde ese mismo instante. F: Todas las imágenes cortesía del restaurante Chirón

Sí que es verdad que descubrir el restaurante que dirige Iván Muñoz puede resultar un pelín aparatoso si no tienes coche, no dispones de mucho tiempo y no quieres gastarte mucho en desplazamientos; pero merece la pena. A 35 kilómetros de Madrid (en Valdemoro para ser más exactos) y regentando ya una estrella Michelin (que eso siempre da mucho empaque), Muñoz recibe con el mejor de sus artes: la buena cocina.

El chef Iván Muñoz se encarga de que estas fiestas tu mesa luzca diferente sin tener que poner patas arriba la cocina con Chirón llega a casa, su servicio take-away

Un restaurante familiar por el que ya pasan tres generaciones, y que siempre ha mantenido una hoja de ruta apegada a la autenticidad, a la tradición y a la materia prima más excelente. Pilares que se extienden de la cocina a la sala y, ahora, al delivery; sorprendiendo en el transcurso y dejándonos con ganas de más.

Una propuesta rompedora para esta normalidad que queremos que pase pronto, pero que sobrellevamos con placeres como los que encontramos en su Chirón llega a casa, una caja de fríos y calientes con vermut Zecchini para brindar en casa.

Ya, pero… ¿qué encontramos dentro? Pues todo lo necesario para darte un buen banquete o daros, dado que es un menú para dos personas. ¡Apunta! Botellín de crema de calabaza y coco con curry, yogur de morcilla, croquetas melosas de jamón ibérico, terrina caramelizada de foie con perdiz y membrillo, ensaladilla rusa con sardina ahumada y encurtidos, minihamburguesa de solomillo y, de postre, flores manchegas sobre crema de mango, toffee de tamarindo y cacahuetes garrapiñados. ¿Te parece insuficiente y quieres extras? Pues a por los callos a la madrileña, el arroz caldero de pescado y marisco y más croquetas de ibérico porque, quizá, nunca sean suficientes. Con todo esto, ¿cómo no vamos a olvidar, por un ratito, todo lo malo que hay ahí fuera? ¡Gracias, Iván! ¡Feliz Navidad, Chirón!