Duane Keiser, el creador de las pinturas que querrás llevarte a la boca
No hay nada mejor en una mañana soleada de domingo que un buen café al aire libre y una inyección de inspiración. Nuestro nuevo descubrimiento semanal es el artista Duane Keiser, autor de las pinturas más apetecibles que habrás visto en mucho tiempo. Son tan realistas que te darán –literalmente– ganas de comértelas. F: Todas las imágenes por cortesía de Duane Keiser
Con base en Richmond (Virginia), Duane Keiser estudió pintura en el Randolph-Macon College de Ashland (Virginia, Estados Unidos) y en el Brooklyn College de Nueva York; y fue introducido por primera vez en su medio artístico actual –los bodegones– mientras estudiaba en el instituto, en Bruselas. Duane recuerda en It’s Nice That que se sintió atraído por el proceso de pintura al óleo y “el olor del aceite de linaza”.
Broken Egg, de Duane Keiser.
Las temáticas de Duane Keiser no tienen límites, y van desde un huevo roto a un vaso de whisky, pasando por un aguacate recién cortado por la mitad
Ahora, más establecido, el artista aprecia “su capacidad de trabajo infinita y sus cualidades táctiles casi mágicas”. La prueba viva de ello son sus ávidas representaciones de los detalles de la vida; que son, al final del día, aquello que la conforman. Sus temáticas no tienen límites, y van desde un huevo roto a un vaso de whisky, pasando por un tenderete de libros en el mercado o un aguacate recién cortado por la mitad.
Además, su blog A Painting Day ha aparecido ya en medios de la talla del New York Times o el Huffington Post; sirviéndose de una caja de cigarros, realiza una pintura del tamaño de una postal todos los días y la publica en su blog, donde los coleccionistas pueden pujar por ellas a través de eBay. Pero como, en palabras de Samanta Villar, no es lo mismo verlo que contarlo, vamos allá.