Oswaldo Brito y Bernat Bermudo, un venezolano y un catalán que hace ya años cayeron en la cuenta del buen tándem que formaban a los fogones, son los responsables de que Good2b tenga nuevo restaurante favorito un Poblesec. Un oasis gastronómico en una zona cada vez más transitada por paladares sibaritas, donde este acertado cóctel de chefs pone en práctica lo aprendido en las infinitas lecciones que ambos tomaron en Hofmann, así como en cocinas como la de Jean Luc Figueras, Gaig o Mugaritz. Hablamos del Mano Rota, claro.

Un oasis gastronómico en una zona cada vez más transitada por paladares sibaritas

El resultado es un restaurante que transmite la sensación de dinamismo sólo entrar. Un lugar cómodo, de espíritu cosmopolita y con precios asequibles, si tenemos en cuenta lo que sirve. El espacio bascula entre su barra, un lugar donde los maestros mandan y se sirven los platos predilectos de Oswaldo y Bernat, que se estructuran en dos menús degustación -uno de 35 y otro de 55 euros-; y la mesa, donde se propone una carta breve pero infinitamente sabrosa, llena de matices y con texturas sorprendentes. Ambas opciones tienen algo en común, un punto muy gamberro que solo se pueden permitir aquellos chefs que realmente tienen un savoir faire exquisito cuando ponen las manos en la masa.

Su carta es breve y concisa, lo que nos asegura un producto fresco y que, a juzgar por lo demandadas que están tanto las mesas como la barra, parece escogido bajo el criterio caprichoso de los mismos comensales. Te recomendamos dar comienzo al festín con sus croquetas de yuca y scamorza con mayonesa cítrica, seguir con la ensalada de sardina ahumada y tomate asado o la stracciatela -aka el cremoso interior de la burrata-, un bien muy preciado entre los foodies con nivel proficiency. El ceviche de corvina con ají ahumado o el pulpo al carbón con ‘cansalada’ son otros firmes candidatos para seguir con el manjar, que recomendamos terminar con el suquet Thay o la presa ibérica trufada con alcachofas y patatas. Entre los postres, nos conquistó el ganache de choco blanco y yogurt griego con frutos rojos y el chocolate con avellanas -tan sencillo como sabroso-, aunque recomendamos darle una oportunidad al sorprendente carrot cake, ni que sea por su original presentación. El precio medio de la carta ronda los 25-30 euros, aunque está bien saber que también tienen un menú de mediodía por 14 euros.

Si aún no te has decidido, aprieta el play en el vídeo que tienes bajo estas líneas…