En pleno corazón de Malasaña encontramos uno de los proyectos gastronómicos más interesantes del barrio. Hablamos del Mercado de San Ildefonso, que nació con vocación de street market, un concepto que no nos puede gustar más. El resultado es un mercado de diseño en el que no solo puedes comprar los productos de sus paradas, sino también degustarlos.

El Mercado de San Idelfonso ocupa 500 m2 distribuidos en tres plantas con 18 puestos de comida y tres barras con bebida. Un espacio que se abre a la calle y que además cuenta con patios que hacen de terraza y que dan vida al lugar. En la segunda planta cuenta con otra barra más grande y un espacio ideal para para montar eventos o un show cooking. Sus puestos ofrecen de todo, desde hamburguesas, café o frutas, pasando por quesos, conservas de toda la vida, el infalibre jamón ibérico o las siempre triunfantes croquetas. Tampoco se echan de menos stands especializados en vino y cerveza, los caldos de la vida.

El diseño del espacio apuesta por un look industrial donde destaca la madera y el hierro, que da vida a un buen street market en el barrio más hipster de Madrid en el Mercado de San Ildefonso. No obstante, cabe tener en cuenta que el espacio tiene historia, pues realmente fue un mercado en el siglo XIX, que hoy en día no tiene nada que envidiar a la oferta de Nueva York, Singapur o Londres.