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Bru Romero

Los que tengan algunos añitos más (no muchos más, pero sí algunos), recordarán que antes, que no había tanta «tontería», se salía a comer y/o cenar. Un verdadero disfrute para el paladar, que no se perdía en superficialidades porque el producto, y nada más, era el encargado de mantener esas conversaciones con el comensal que fidelizaban y con razón. Por eso, restaurantes como Rural nos pegan tan fuerte, que nos hacen recordar el verdadero objetivo de un chef cuando se pone a cocinar para nosotros: que disfrutemos, como niñxs chicxs, comiendo.

Situado a escasos metros del Paseo del Prado (lo que nos permitiría disfrutar de un voltio de esos otoñales y soleados que tan bien nos vienen para la carita), Rural es un «espacio de atmósfera ancestral», como ellos muy bien saben definir. Un restaurante donde el disfrute es la máxima y materias primas como el cerdo, el cordero, el buey, la vaca, la caza, las setas, las legumbres o las hortalizas la base de unos escabeches, guisos, patés, fritos, marinados o salazones que nos conectan con lo verdaderamente importante.

La carne en todas sus formas y disposiciones se convierten en la excusa para acudir a este Rural solo apto para comensales de colmillos afilados

Un restaurante sobrio, de líneas muy puras donde desconectar del ruido y masticar hasta gozar. Un rural con el chef Alberto Pacheco a los fogones y Rafa Zafra, Anna Gotanegra y Ricardo Acquista como columnas de un proyecto que se nota que ha llegado para alegrarnos la vida o, al menos, poner su granito de arena para que eso ocurra.

Un lugar al que peregrinar si del animal te gusta aprovecharlo todo y si cansado estás de esos otros restaurantes que te prometen lo superior para luego quedarse en el chasis. De ahí, que Rural sea la apuesta del visionario chef Rafa Zafra por homenajear a todos esos platos de nuestro recetario más tradicional, pero traídos a la actualidad sin perder su gracia.

¿Y qué pedimos? Pues su terrina de perdiz y pistachos o el rillette de faisán y trufa, las láminas de Wagyu con foie gras, el mollete de pringá o el de papada con mostaza, las mollejas de ternera en adobo, el flamenquín de codorniz, su pincho de cordero, el salteado de riñones al jerez, sus verdinas con rabo de toro, su foie sauté con frutos rojos, las chuletitas de cabrito o un cochinillo de Segovia de 21 días que podría plantarle cara a los de Cándido. Carnívorxs, hedonistas… ¡estáis de enhorabuena!

Detalles




  • Dirección: c/del Marqués de Cubas, 8
  • Horario: M-S: 13,30h a 16,00h y 20,30h a 22,45h
  • Teléfono: 915 42 98 36
  • Tipo: Hotspots
  • Web: https://www.restauranterural.com/