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Ainhoa Gurruchaga

Cuando pensamos en comida mexicana, enseguida nos vienen a la mente burritos, tacos, carnitas, chile, alambres… Todo siempre con carne. Y nos cuesta imaginar opciones vegetarianas o veganas más allá de una enchilada. Ya está, pan con queso; como si los mejicanos no hubiesen podido pensar en nada más. Pues bien, para todas las personas escépticas ha llegado el nopal, bueno, realmente estaba desde hace tiempo. Os cuento rápido.

Si ya los aztecas tomaban el nopal como remedio para diferentes curas de infecciones, cómo no íbamos a querer comernos algo así

El nopal es un vegetal como cualquier otro, ya está, sin misterios. Lo que pasa es que tenemos que dejar de tratarlo como a un cactus con pinchos. Se trata de un tipo de cactus cultivado principalmente en Centroamérica, América del Sur, África y Oriente medio; y a nivel gastronómico sus posibilidades culinarias son infinitas: guisado, a la plancha, rebozado… Además, es rico en agua, fibra y proteínas; y su gran porcentaje de vitaminas y minerales como el potasio, el magnesio, el hierro o el calcio lo convierten en un aliado perfecto no solo para la cocina, si no también para la salud. Si ya los aztecas lo tomaban como remedio para diferentes curas de infecciones, cómo no íbamos a querer comernos algo así.

Quisimos ir a probarlo y por eso nos fuimos a Pikio Taco, una de las taquerías de referencia de Barcelona ubicada en el barrio de Gràcia de la ciudad. El artwork de sus paredes cortesía del artista Zosen, sus chupitos frozen margarita y sus míticos nachos que no decepcionan a nadie –probablemente entre el top 5 de los mejores de la Ciudad Condal– fueron razones más que suficientes para vivir una noche veggiecana, vaya, vegetariana y mexicana.

El taco CHIAPAS. Cortesía de Pikio Taco

El nopal es perfecto para ensaladas con frutas, guisos, arroces, fajitas, enchiladas, canelones, asados, en salsa, en salmuera y un largo etcétera

Tienen una carta amplia y con el tiempo sus tacos han ido evolucionando con ingredientes variados, siempre trabajando con productos locales pero respetando los productos de origen mexicano y adaptando su cocina a opciones aptas para personas celíacas, vegetarianas y veganas. Quisimos probar los dos tacos que tienen en su carta aptos para veggies: AMECAMECA, taco de Rajas poblanas (tiras de chile poblano) con maíz, queso mozzarella, rábanos frescos marinados en agua de azahar y láminas de yuca frita; y el CHIAPAS, el taco vegano con nopal rebozado en nachos con canónigos, chirivía en escabeche, brotes de alfalfa, palomitas al curry y salsa de zanahoria. Todo regado con unas buenas micheladas y acompañado de una ración obligatoria de nachos (se puede pedir opción vegetariana y vegana).

Tras días de investigación, tuve una revelación: el nopal es como nuestro calabacín. A diferencia de lo que podría parecer, no es difícil cocinarlo. Las palas o pencas se tienen que lavar bien y luego se cortan para hervir, asar o saltear. Debido a sus múltiples propiedades nutricionales, muchas personas lo toman en infusiones y los más foodie los incluyen en sus smoothies. Combina a la perfección con el sabor del queso, el cilantro, los huevos, la lima… Y es perfecto para ensaladas con frutas, guisos, arroces, fajitas, enchiladas, canelones, asados, en salsa, en salmuera y un largo etcétera. A mí ya me ha conquistado, ¿a qué esperas para que te conquiste a ti también?