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Júlia Creus

Lo has leído bien: por fin, estamos más cerca de tener una píldora anticonceptiva masculina. El amplio abanico de la anticoncepción hace referencia a una amplia variedad de prácticas, métodos o dispositivos que las personas pueden usar a la hora de tener relaciones sexuales con el fin de evitar un embarazo. Pero, ¿sobre quién consideráis que recae la responsabilidad de evitar un embarazo no deseado? A la mujer, ¿cierto? Malditos esterotipos. Pues bien, en una realidad utópica, la anticoncepción es una responsabilidad compartida, aunque la escasez de opciones existentes para los hombres se limite a los preservativos y la vasectomía, en comparación a las infinitas opciones que tienen las mujeres. F: ADAM HART-DAVIS/SCIENCE PHOTO LIBRARY © Getty Images

No nos equivoquemos, prevenir el embarazo también es trabajo de los hombres.

¿A qué se debe todo esto? ¿Por qué existe esta desigualdad de métodos disponibles en nuestra sociedad? ¿Falta de interés o de aval científico? Lo cierto es que este melón está abierto desde hace mucho tiempo y que, desde los años 50’s, hay muchas investigaciones en curso sobre diversos métodos anticonceptivos hormonales y no hormonales en el aparato reproductor masculino. Ahora, por fin, después de décadas y décadas de trabajo, parece ser que la anticoncepción masculina efectiva será una realidad y estará a nuestro alcance dentro de poco tiempo.

Desde los años 50’s, hay muchas investigaciones en curso sobre diversos métodos anticonceptivos hormonales y no hormonales

Estamos hablando de la YCT-529, el avance más prometedor hasta el momento que es resultado de una investigación por parte de Gunda Georg, director fundador de los Institutos para el Descubrimiento y Desarrollo Terapéutico, y del fabricante YourChoice Therapeutics. A diferencia de la píldora anticonceptiva femenina, la masculina busca bloquear el acceso de la vitamina A y, de esta manera, impedir la producción de espermas, ya que investigaciones anteriores descubrieron que las deficiencias de vitamina A podrían causar infertilidad. ¿Y por qué? Bien, pues porque tiene un efecto antioxidante, por lo que, normalmente, ayuda a la producción de espermas y a la mejora de la calidad del semen. Por lo tanto, impedir este proceso podría ser una alternativa mucho más atractiva para los hombres frente al resto de propuestas que cuentan con inyecciones hormonales y que desarrollan efectos secundarios no deseados, como es el caso del aumento de peso, el acné y de los cambios de humor.

Este nuevo método anticonceptivo masculino sin hormonas se puso a prueba con ratones macho durante diferentes ensayos clínicos y… ¡Sorpresa! La pastilla mostró una eficacia del 99% en la prevención del embarazo y fue 100% reversible sin ningún efecto secundario. De hecho, los ratones volvieron a ser fértiles entre cuatro y seis semanas después de suspender la píldora.

Así pues, el primer anticonceptivo masculino no hormonal superó con éxito la fase preclínica. Por esta razón, ya han empezado los primeros ensayos con humanos, específicamente con 16 voluntarios británicos, con quienes se están evaluando factores como la tolerancia, la seguridad y la farmacocinética de la pastilla, entre otras cosas. Si todo va bien y el medicamento muestra seguridad y eficacia en estos ensayos con humanos, podremos verla pronto en los estantes de las farmacias.

Por lo tanto y después de una larga espera, tener a nuestro alcance un anticonceptivo masculino eficaz será todo un triunfo para las relaciones y para las mujeres. De hecho, la igualdad de opciones promoverá el éxito en las relaciones, ya que tendrá un impacto positivo en el acto sexual, en el bienestar mental de los implicados y en la dinámica de poder entre hombres y mujeres.