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Laura Milán

El metaverso. Para muchxs, un mundo totalmente desconocido. Para otrxs, un universo repleto de oportunidades. Este pasado mes de febrero de 2022, Maria Pascual y su equipo decidieron reinventarse y lanzar la colección Universe Maria Pascual para introducirse en el metaverso. Entrevistamos hoy a la fundadora, creadora y diseñadora de su marca homónima, la empresa de joyas que tras casi una década se ha posicionado como una de las firmas referentes en el sector de la joyería de nuestro país. F: Cortesía de Maria Pascual

La colección Universe Maria Pascual es de formato híbrido y está creada para los dos universos existentes, el real y el digital

De formato híbrido, la primera colección diseñada para el metaverso de la marca está creada para los dos universos existentes, el real y el digital, y la encontrarás disponible en Decentraland. Universe Maria Pascual se compone de tres wearables, piezas exclusivamente digitales para el metaverso: las Spacewalker Boots, el Supernova Bracelet y el Pioneer Helmet; además del Astronaut Necklace, una pieza física y limitada a 300 unidades. Hablamos hoy con la diseñadora acerca de su experiencia en todo el proceso del diseño de las piezas digitales, este nuevo reto y el futuro de la marca.

¿Cuál ha sido la fase más complicada en todo proceso del diseño de las piezas digitales y por qué has diseñado estas piezas en concreto? Yo diría que la fase más complicada del proceso para el equipo fue decidir qué tipo de NFTs íbamos a sacar al mercado, ya que en la parte técnica confiamos en un estudio especializado. Como habréis visto, no son joyas en el sentido tradicional de la palabra. Quisimos ir más allá y
reinventar este concepto. Una joya es, al fin y al cabo, un accesorio, un objeto con un valor. Puede tener mil significados, así que optamos por alejarnos de la representación tradicional y, en lugar de crear collares, pendientes o anillos, sacar una colección de Wearables inspirados en la vestimenta de un astronauta.

¿Por qué has diseñado estas piezas en concreto? Relacionamos los wearables con la temática del espacio porque para nosotras suponía un aterrizaje en un nuevo mundo. Salíamos de nuestra tierra, de nuestra zona de confort, para adentrarnos en un nuevo universo. Vimos muchas similitudes con la exploración espacial, así que pensamos que sería una temática que podía encajar mucho con el lanzamiento de nuestra primera colección virtual.

¿Cuál ha sido tu inspiración para crear la colección? ¿Tienes algún referente en el campo del diseño de moda digital? La verdad es que no teníamos un referente como tal. Hicimos una investigación de lo que se estaba haciendo en el entorno del metaverso, tanto a nivel del tipo de evento como de NFTs que se han lanzado en los últimos meses al mercado. Nos empapamos de muchos estímulos distintos y a partir de ahí fue cuando detectamos el nicho al que podíamos dirigir nuestro producto digital. Lo que sí puedo decir es que, al tratarse de un entorno virtual, las marcas están aprovechando la libertad creativa que ofrece este mundo. ¡Vimos proyectos increíbles!

Al tratarse de una colección híbrida, ¿has pensado en tangibilizar los wearables de la colección para que puedan llevarse tanto dentro como fuera del mundo virtual? Sí, pensamos en crear el mismo producto y aterrizarlo en ambos mundos. Es algo que no descartamos para un futuro cercano: traspasar la barrera del lifestyle, que hasta ahora hemos vivido en la comunicación en redes, y materializarla tanto digital como físicamente. Un accesorio puede acompañarte en el mundo físico, pero también la versión virtual puede acompañar a tu avatar. Al final, descartamos la idea en esta primera fase. Nuestro negocio en el mundo físico sigue siendo las joyas, y la forma que vimos de relacionar una realidad con la otra fue mediante la creación del Astronaut Necklace: un collar de edición limitada que va seriado y representa un astronauta en una medalla. Fue una experiencia emocionante ligada a la adrenalina de la situación, de lanzar algo tan nuevo que nadie se lo esperaba. Pero actualmente y en el momento en el que se encuentra aún el metaverso (está en una fase muy experimental) no es algo por lo que apostaremos al 100%. Más que por viabilidad económica, vimos una manera de abrir nuevos debates y un abanico creativo increíble. Aún así, animaría a cualquier persona o marca a indagar un poco en este nuevo mundo, ¡ya que es sin duda fascinante!

El Astronaut Necklace, disponible en la web de Maria Pascual. © Maria Pascual

¿Si tuvieras que elegir crear piezas físicas o virtuales, después de tu experiencia en ambos campos, con cuál te quedarías? De momento en Maria Pascual no contemplamos el metaverso como un negocio rentable. Nos encontramos aún con muchas limitaciones tecnológicas, no todo el mundo tiene acceso a Decentraland (aún no está disponible la versión mobile, por ejemplo) y poder tener una experiencia plena y fluida requiere de un equipamiento bastante caro. Este mundo virtual aún está dando sus primeros pasos, y más que una forma de expandir la marca, vimos una manera de hacer algo disruptivo e inesperado para una marca como la nuestra. De momento, me quedo con las piezas físicas. No solo porque el diseño de joyas sea mi pasión y porque llevamos ya casi 10 años remando en este barco. Me sigue haciendo mucha ilusión ver a la gente llevando mis joyas en redes sociales, por la calle. Es mágico y algo que, de momento, no podríamos conseguir en la realidad virtual.

¿Has enfocado la colección a una audiencia en concreto o has querido ir más allá de vuestra comunidad, para conectar con las nuevas generaciones de clientes digitales? El habernos alejado del concepto de joya tradicional respondía también a la necesidad de dar una nueva perspectiva de lo que es Maria Pascual. Después de casi 10 años estamos establecidos en el mercado y se tiene una imagen definida de quiénes somos. Pero Maria Pascual es mucho más que joyas, y optar por hacer NFTs distintos a nuestro producto físico nos permitía acercarnos a una nueva comunidad digital, conectar con otra audiencia y evaluar qué impacto generamos. Poco después del evento, un chico nos etiquetó en una historia de Instagram llevando uno de los wearables que habíamos lanzado. Nos contó que, tras verlo, su novia le preguntó por qué había etiquetado a Maria Pascual, desconociendo ella que habíamos saltado al mundo virtual. Para nosotras, ha sido un modo de cruzar audiencias y de despertar el interés en personas que desconocen este mundo. Al final del día, nuestra audiencia no está familiarizada con el metaverso. Aún así, nos hemos puesto como meta que poco a poco los iremos acercando y dándoles píldoras de contenido para que sepan qué es un NFT, un POAP (un certificado digital en formato NFT que demuestra la asistencia a un evento en el metaverso o en el mundo real), una MetaMask… Todos estos conceptos ligados al metaverso han venido para quedarse, y Maria Pascual se ha subido al tren para ir delante.

¿Crees que al haber adentrado la marca en esta nueva dimensión emergente va a aumentar notablemente su visibilidad? ¡El metaverso aún tiene que atraer muchos adeptos! Es un mundo muy nuevo y, aunque ya hay mucha gente interesada que está al día de todo, no ha llegado al mainstream. Por supuesto que la visibilidad de Maria Pascual ha aumentado en la esfera virtual. De hecho, la comunidad NFT es una de las más agradecidas, amables y alentadoras que he visto nunca. Reciben con mucho entusiasmo a toda persona o marca que se sume a nutrir este universo. El evento tuvo muy buena acogida y nos sorprendimos, ya que era la primera vez que hacíamos algo similar.

¿Qué otras propuestas digitales enfocadas al metaverso plantea Maria Pascual? No puedo desvelar mucho al respecto, pero hay algo en el horno. Lo que podéis esperar en los próximos meses son nuevas colecciones físicas, y estamos trabajando paralelamente en la expansión internacional de la marca. ¡Tendréis que seguirnos la pista para ver lo que viene!