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Ariana Díaz Celma

Hace cinco años que se instalaron en un sótano del centro de Estocolmo, y desde entonces los tres miembros de Studio Barnhus no han dejado de facturar temas con una clara cadencia house. Ellos son Axel Boman, Kornél Kovács (aka Koko) y Petter Nordkvist, un grupo de amigos que ha extendido su arte de producción no sólo a los temas propios, sino a aquellos que facturan artistas por los que sienten simpatía. Un trío ganador que resulta de la suma de tres carreras jóvenes pero con una sensibilidad cálida y muy bailable. Petter -quizás el que tiene una carrera más longeva- lleva desde los ’90 produciendo hits en modo non stop -ha publicado en Border Label, el sello de James Holden- y también factura temas en el sello bajo el alias Pedrodollar; Kórnel Kovács es el responsable de uno de los programas de radio de música electrónica más potentes de Suecia, P3 Dans, y el artífice del edit ‘Ivan’, que en Good2b mandamos de cabeza a lo mejor de 2014; y Axel Boman nos deleitó hace un par de años con su finísimo disco Family Vacation, además de ser el 50% de Talaboman, el dúo que forma junto a John Talabot, uno de nuestros Dj’s patrios más internacionales. La suma de tal conocimiento resulta en Studio Barnhus, un sello que también da nombre a las sesiones que sus tres miembros hacen por todo el planeta. Imperdible esta entrevista, perfecta para leer mientras escuchas el flamante Good Fridays que han dedicado a nuestros amigos de Playmoss… 

Barnhus, el nombre de vuestro sello, significa ‘orfanato’ en sueco. ¿Cuándo lo creasteis os sentíais huérfanos de cierta escena musical en Estocolmo?

A.B: Podríamos contarte dos historias, una más romántica y la otra más práctica y realista.

Frankie Knucles es nuestro padre, Jeff Mills nuestro abuelo y la música house nuestra familia

Empieza con la romántica…

A.B: Somos huérfanos que nunca han conocido a sus progenitores. Así que desde pequeños hemos tenido a Frankie Knuckles como padre adoptivo y a Jeff Mills como abuelo. Y nuestra familia es la música house.

K.K: Además, en el estudio nos comportamos como niños y hacemos lo que queremos, sin reglas. Cuando nos metemos ahí es como vivir una segunda juventud.

¿Y la realista?

A.B: Nuestro estudio está en un sótano del centro de Estocolmo situado en la calle Barnhus.

¿Qué debe tener un artista para formar parte de la familia Studio Barnhus?

A.B: Al principio empezamos produciendo a amigos. Ahora podemos decir que producimos a artistas que tengan la posibilidad de estar en la cubeta de house de una tienda de discos. Estoy de broma, las etiquetas nos dan un poco igual. Siempre he pensado que la mejor música la hace gente a la que no le importa lo que crea, sino que es instintiva. De hecho siempre intentamos hacer un hueco a propuestas distintas. Si nos mandas un tema, seguramente tendrás más posibilidades de que te publiquemos algo por ser mujer, porque no tenemos a ninguna y nos apetece. No quiero que nuestro sello sea una cosa de hombres, por ejemplo. Queremos destacar y ser punteros.

K.K: Hace poco entré en una tienda y me encontré un disco de Lukas Von Nystrand, que forma parte de nuestro sello, en la cubeta de ‘house alternativo’. Es algo que me llenó de orgullo.

Y si la propuesta no es house, ¿también le echáis un vistazo?

AB: Si no es house pero la idea es buena, nos gusta. Tiene que ser algo nuevo, que nos sorprenda, si tu música tiene algo conceptual seguro que tendrás más oportunidades de estar en Studio Barnhus.

K.K: Aunque pensemos que vamos a perder dinero, a veces hemos publicado a ciertos artistas porque creemos en lo que hacen, aunque sepamos que a nivel comercial va a ser un desastre.

¿Qué artistas os gustaría tener en el sello?

AB. Mathew Herbert siempre tendrá las puertas abuertas.

K.K: Me pregunto si Enya tiene algo por publicar, también sería interesante… (risas)

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Kórnel, tú estuviste en la Red Bull Music Academy de Barcelona. Y tú, Axel, viviste aquí hace años y, de hecho, compartes proyecto con John Talabot en Talaboman. Además, en tu disco Fantastic Piano hay un tema que se llama ‘Barcelona’. ¿La ciudad os ha influenciado de alguna manera a la hora de hacer música? Podemos decir que todo lo que hacéis suena bastante cálido y poco escandinavo…

AB: De hecho, mis memorias de Barcelona son frías. Me encanta la ciudad, pero como en cualquier relación hemos tenido nuestros más y nuestros menos.

K.K: Yo pasé bastante tiempo aquí con la RBMA y luego empecé a venir muy a menudo y llegó un momento que pasé del amor al odio. Creo que es una ciudad dura, con muchas desigualdades y donde tienes que trabajar muy duro para ser feliz.

AB: Entonces llega el punto en el que ves a Freddie Mercury y se te pasa todo. Vuelves a amarla.

K.K: Exacto, yo vuelvo a amarla a pesar de todo. Así son las relaciones largas, ¿no?

Hablando de relaciones, Axel, resulta casi obligatorio preguntarte cómo empezó tu relación con John Talabot, uno de nuestros artistas más internacionales…

A.B: La verdad es que se lo debo a Petter, el tercer miembro de Studio Barnhus. Él lleva años haciendo hits y giras por todo el mundo. Le conoció en uno de sus viajes e insistió  en que teníamos que quedar porque encajábamos muy bien. Y razón no le faltaba, Talaboman se ha convertido en un buen proyecto.

Vuestros hotspots favoritos en Estocolmo son…

K.K: Snickars Records, Katarina Olcafé y Citylejon.

Prohibiríais…

K.K: Creo que puedo contestar por todos. Soy judío y creo que la circuncisión debería ser ilegal.

Para vosotros ser Good2b es…

Poder estar triste a veces. Es importante dejarse ir de vez en cuando.