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Ariana Díaz Celma

Pepi de Boissieu es el alma máter de Baba Au Rhum, una empresa que crea eventos a medida con la comida como eje central, una filosofía muy apetitosa en los tiempos que corren. Este estudio creativo utiliza el diseño y el arte aplicados a la gastronomía para crear proyectos que caen como un traje de sastre en cada cliente. Quizás sea porque Baba Au Rhum cree en el poder de la comida como medio de interacción entre personas y en su capacidad para establecer relaciones duraderas, que cada vez son más las firmas que apuestan por su trabajo en sus presentaciones en sociedad. La revista Apartamento, Après-Ski, Nice Things o About Arianne han caído rendidos a las bondades de sus recetas visuales. Su base en Barcelona, epicentro de la cultura gastronómica mediterránea, ha ayudado a que Baba Au Rhum crezca en pleno boom foodie. Suena bien, ¿cierto? Pues sabe todavía mejor.

¿Cómo interactúan diseño y comida en Baba au Rhum?

Comida y diseño van muy de la mano en Baba au Rhum, no porque hagamos ‘food design’, sino porque buscamos siempre un discurso estético en nuestros proyectos. Nos apoyamos en el diseño a la hora de pensar en la presentación y en la formalización de lo que servimos.

Creáis acciones alrededor de la comida y cáterings especializados para cada cliente u ocasión. ¿Cómo se idean los proyectos? ¿Cuál es el proceso de creación?

Los proyectos empiezan siempre con una reunión con el cliente, donde le pedimos que nos empape de su mundo y de sus inspiraciones. Queremos saber siempre cuáles han sido sus referentes para poder empezar a pensar en algo. A partir de aquí buscamos conceptualizarlo a través de la comida. Buscamos nuestras propias inspiraciones del concepto que concebimos y tratamos de descodificarlo visualmente.

«Comida y diseño van de la mano en Baba au Rhum, no porque hagamos ‘food design’, sino porque buscamos siempre un discurso estético en nuestros proyectos»

Cuéntanos que relación tienen la comida y la comunicación…

¡Muchísima! La comida es comunicación porque básicamente el ser humano siempre se relaciona a través de la comida o la bebida. Siempre que quedamos con alguien hay un plato o un vaso de por medio. Nosotros creemos mucho en que la comida incita a conversaciones, reflexiones, buenos momentos. Por eso apostamos en nuestro trabajo, la gente que nos contrata entiende que si hay comida de por medio mucho mejor que tenga coherencia con lo que se está comunicando, que sea una cápsula de contenido más.

Sabemos que has estado en Nueva York trabajando en distintos proyectos. Puesto que su tradición culinaria no es tan extensa ni longeva como la nuestra, ¿qué diferencia ves en el trato de los alimentos aquí y ahí?

Lo interesante de Nueva York es que tiene una mezcla de tradiciones culinarias infinitas a través de la inmigración, que ha tenido desde la formación de su país. Encuentras de todo, hay un mix cultural que es fascinante y muy rico a la hora de jugar con propuestas de comida. Hay, sobre todo, y a diferencia de aquí, una consciencia enorme sobre el producto local, responsable y orgánico.

De hecho, aunque nuestra tradición culinaria sea amplia (lo que ahora conocemos como bloggers gastronómicos no son más que la evolución de la Generación Gastronómica del ’27), sí es cierto que ahora ha habido un boom foodie. ¿A qué se debe? ¿Qué factores se han dado para que la comida suscite tanto interés?

Sucede que la comida es una herramienta nueva de trabajo. Y no solamente a nivel gastronómico, la comida se ha empezado a utilizar en la moda, en la literatura, en el diseño y en el arte. Y las posibilidades de exploración son infinitas. La comida como medio de expresión forma parte de la cultura y se ha puesto en valor.

¿Qué le dirías a alguien que dice que jugar con la comida está mal?

Pues depende de cómo se juegue. Yo creo que mientras se respete el hecho de que la comida no se puede tirar y, sobre todo, que hay que aprovecharla, se puede plantear todo tipo de juego. Creo que el único problema que puede surgir es la banalidad de la comida siendo ésta un recurso -aunque no debería serlo-, limitado para mucha gente.

Dinos tu plato favorito y un par de ingredientes que nunca pueden faltar en tu casa.

Con un buen arroz siempre estoy feliz y en mi casa nunca pueden faltar huevos y parmesano.

Tus hotspots favoritos son…

En Barcelona voy mucho al Sagás (C/Pla de Palau, 13). Me encanta lo que hace el chef Oriol Rovira. Ahora acabo de descubrir Pork (C/Consolta de Mar, 15) y la carta es increíble. Otro sitio que me gusta mucho es el Xemei. Y mi tienda preferida es AOO, absolutamente todo me gusta.

No puedes parar de escuchar en modo repeat…

Nunca pensabas que terminarías…

Gustándome tanto la jardinería.

Para ti ser Good2b es…

Una buena manera para estar al día.

*Fotos por Cecilia Díaz Betz