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Laura Milán

Justo cuando pensábamos que el ser humano no podía cruzar ya más límites, va y lo hace, esta vez con fake nudes y la ayuda de la Inteligencia Artificial. Si bien esta ha optimizado muchísimos de nuestros procesos y nos ha traído infinidad de avances, el ser humano tiene la manía persecutoria de darle un mal uso. Y es que a algunxs se les olvida que hay que tener cuidado con la tecnología, especialmente si su aplicación puede llegar a perjudicar a lxs demás. Dicho esto, vamos al grano: resulta que los hay que llevan años creando desnudos falsos de mujeres para filtrarlos por Telegram y otras redes sociales como Twitter, y ahora lo están haciendo a través de la IA. Y te preguntarás, ¿cómo es esto legal? F: Fotograma de la última temporada de Black Mirror, en la que la protagonista intenta tomar medidas legales contra el robo de su imagen en un programa de televisión, sin éxito.

La diferencia entre los fake nudes de hace unos años y los de ahora es que a día de hoy prácticamente no puedes diferenciar si son reales o no

Todo empezó hace unos años, cuando un programador anónimo lanzó una aplicación llamada DeepNude, que generaba fotografías de mujeres desnudas de lo más realistas en cuestión de segundos. La app costaba 50$ y aunque -por desgracia- las descargas fueron muchas, en cuestión de horas el propio creador tuvo que eliminarla por cuestiones evidentes. No obstante, por lo que sea -lo poco que ha importado proteger a las mujeres de este mal-, ahora ha vuelto y es aún peor porque, evidentemente, la Inteligencia Artificial ha mejorado de manera exponencial. Así, la única diferencia entre los fake nudes de antes y los de ahora, es que a día de hoy prácticamente no puedes diferenciar si son reales o son falsos, y este tipo de app te los genera tanto en formato fotografía o como en vídeo. Además, si le sumas el hecho de que el contenido generado online se viraliza en cuestión de segundos…la cosa se convierte en un gran monstruo difícil de parar.

En general, las celebridades son las que están saliendo más perjudicadas con la situación, pero en realidad nadie está a salvo y no sólo se generan para ganar algunas monedas: también hay mujeres completamente anónimas que están sufriendo este acoso.

Y ahora llega la pregunta esperada: ¿dónde está la justicia cuando más se la necesita? Pues bien, en un pasado salió alguna que otra ley para regular todo este panorama, pero no sirvió de mucho porque apenas se ha avanzado en este problema pasando lo que pasa siempre: la tecnología va muchísimo más rápido que la legislación -ligada a la burocracia-. Eso sí, cuando se han filtrado imágenes de personas que tienen la influencia y el poder de su lado -o son hombres blancos y heterosexuales- como Donald Trump o el Papa, se ha actuado como alma que lleva el diablo.

Aunque por ahora la cosa está yendo muy pero que muy lenta, ya hay algunos gobiernos como el de Estados Unidos o el del Reino Unido que están empezando a estudiar maneras de acabar con esta problemática lo más pronto posible.

¿Qué hacer mientras tanto? Lo de siempre. Si llega a tus manos material robado o generado por IA de alguien -famoso o no-, no le des bola. Ten empatía y no compartas, denuncia para que lo retiren de dónde quiera que lo hayan colgado y cántale las cuarenta a la persona que te lo haya hecho llegar.